Primera pole de España en un torneo de la FIFA

Copa Confederaciones | Nueva Zelanda - España

Primera pole de España en un torneo de la FIFA

Primera pole de España en un torneo de la FIFA

La Roja debuta ante Nueva Zelanda con Italia y Brasil detrás.

España se presenta por vez primera en su historia como favorita para un torneo de la FIFA. El éxito en la pasada Eurocopa aupó a la Selección al número 1 del ránking mundial, y las diez victorias posteriores han reafirmado a la Roja como el rival a batir por los otros dos grandes aspirantes al título: Brasil e Italia, por este mismo orden según las apuestas.

La Roja ha participado en muchas fases finales de torneos de FIFA y nunca ha ganado nada a este nivel. La Eurocopa es un título continental, de UEFA, que es lo mismo que han ganado las otras selecciones que participan en la Confecup, salvo el caso de Suráfrica que lo hace como país anfitrión. España es favorita, pero también novata. Hasta Nueva Zelanda, número 82 del ránking mundial y rival de hoy, ha participado ya tres veces en la Copa Confederaciones, aunque lo ha hecho en un sólo Mundial, precisamente el que se celebró en nuestro país en el año 1982.

Con los neozelandeses sólo nos hemos cruzado una vez. Y no se nos dio mal: ganó España 13 a 0 en un partido en el que Casillas, que entonces tenía 16 años, fue suplente. Fue en el Mundial Sub-17 de 1997, en Egipto. Ese resultado permanece hoy como récord absoluto en las competiciones de la categoría.

Se nos ha atribuido el papel de favoritos un poco a la fuerza, porque como dice Del Bosque "eso, sin ser mentira según la clasificación de la FIFA, es algo que a los rivales, sobre todo a Brasil e Italia, les conviene que circule. Les quita presión y nos las traslada a nosotros. No me lo creo".

Nueva Zelanda, mientras, se pone la piel de cordero. "Todo lo que sea perder por cuatro a cero o menos estará muy bien", dicen sus jugadores con la boca pequeña. Es la Selección con más altura media de la Confecup: 1,85 metros. Le metieron tres goles a Italia esta misma semana y son fuertes, disciplinados y duros. Entre los 13 que le metió la España del joven Casillas y los cuatro con los que ellos dicen conformarse está la virtud.

Récord. España tiene alicientes para superarse en Suráfrica. El más apeticible, alcanzar la mejor racha nunca vista de partidos invicta. La tiene Brasil con 35 partidos. España lleva 32 sin perder, con lo que de ganar los tres partidos de la fase de grupos (hoy contra Nueva Zelanda y después a Irak y Suráfrica) se encontraría en el partido de semifinales, puede que contra Brasil, con la ocasión de batir su récord.

Junto a los objetivos públicos hay otros privados. Como el que persigue Villa, que acaba de superar a Morientes y a Butragueño en la tabla de goleadores de España y ya le echa el aliento en el cogote a Hierro, que jugó en el equipo en el que podría recalar él este mismo verano: el Real Madrid. Lo mejor de la Selección es que tiene hambre, aspiraciones globales y sueños particulares hacen que esta España tenga una razón para ganar más allá de la de ganar. Esto es lo que hace de la Roja un equipo diferente. Bueno, esto e Iniesta, que por una lesión lo verá por la tele.

Precisamente la baja de Iniesta obliga a un retoque global del equipo. Porque incluso el sistema necesita una variación. Al no estar tampoco Senna, otro eurocampeón, Del Bosque probará el rombo que tanto éxito le dio en el Madrid. Lo que el seleccionador madura es jugar con la doble X (Xabi Alonso y Xavi) para contener y crear. Junto a ellos Riera, para trabajar la banda izquierda, y Cesc, un poco para todo y dejando el carril derecho prácticamente virgen para Sergio Ramos. La otra opción pasa por dar entrada a Cazorla más en lugar de Cesc que de Riera, puesto que Silva aún no está en plenitud y el seleccionador lo reserva para los días grandes (Brasil e Italia, uno o ambos) puesto que, aunque no lo dice, cree que junto con Xavi es el guardián del tiqui-taca en ausencia de Iniesta.

Favoritos. Pelé dice que España es la favorita para ganar la Confecup. La gente también y hasta los jugadores españoles, con Casillas a la cabeza, han tenido que asumir este nuevo rol que ha adquirido la Selección. Hace falta que los jugadores lo ratifiquen sobre el campo, porque se tardó demasiado, 44 años, en salir del túnel para que ahora, en una competición a la que se le da la importancia justa, echen abajo todo ese trabajo. Es lo que van a intentar Brasil e Italia y lo que debe impedir España, para empezar hoy mismo contra Nueva Zelanda.