Un gol del juvenil Borja, que debutaba hoy con el primer equipo del Atlético de Madrid con 16 años, resolvió con triunfo el amistoso contra el IFK Mariehamn finlandés (1-2), con el que el conjunto rojiblanco cerró la temporada antes de iniciar mañana mismo las vacaciones veraniegas.

Era el ''partido del año'' para la capital de las Islas Aland, como figuraba en los carteles del encuentro, y un trámite para los madrileños, con apenas titulares habituales en sus filas, de los que tres (el portugués Simao Sabrosa, el holandés John Heitinga y el checo Tomas Ujfalusi) apenas jugaron diez minutos de inicio, y con la opción de ver en acción a algunos prometedores canteranos.

Uno de ellos fue Keko. El extremo izquierdo forzó el 0-1 en el minuto 24, en una jugada individual interrumpida con la mano por un defensor rival. El consiguiente penalti lo marcó el francés Sinama Pongolle para poner en ventaja al Atlético frente a un contrincante voluntarioso, pero bastante limitado técnicamente.

No ofreció mucho la primera parte, un par de ocasiones claras en ambos áreas en las que sólo la falta de puntería evitó algún gol más antes del descanso, ni tampoco la segunda, en la que Abel Resino transformó su once con la entrada de varios canteranos más y en la que el IFK Mariehamn igualó el duelo con el 1-1 marcado por Geshi.

Quedaba más de media de hora de partido, en la que Miguel de las Cuevas se retiró lesionado en el tobillo derecho y en la que el juvenil Borja debutó con un buen gol, tras superar al portero rival y marcar prácticamente sin ángulo un tanto decisivo para la victoria de su equipo en los últimos minutos.