Almunia para a Cristiano

Liga de Campeones | Manchester United 1 - Arsenal 0

Almunia para a Cristiano

Almunia para a Cristiano

reuters

El United gana al Arsenal con un gol del lateral O'Shea.

En un partido de galácticos, los mejores fueron dos jugadores de la clase media. O'Shea, porque además de marcar el único gol de las dos semifinales de la Copa de Europa destacó en el Manchester, y Almunia, que repelió con manos, pies y estómago (como se ve en la foto) los remates de gol de Rooney, Tévez y Cristiano Ronaldo. Almunia hizo de San Iker y salvó los muebles del Arsenal en Old Trafford. Si los cañoneros se han levantado esta mañana con alguna esperanza de alcanzar la final del 27 de mayo en Roma fue gracias al portero español y, también, al marcaje de Gibbs sobre un Cristiano que anoche estuvo facilón.

Almunia es el mejor portero de Inglaterra. Dicho así es un orgullo. Pero si nos ponemos a pensar que, precisamente por eso, por ser muy bueno, pueden nacionalizarle inglés para llevarle al Mundial de Suráfrica, ya nos fastidia más. Porque en tal caso puede darse la situación de que algún día tenga que hacer con Torres y Villa lo que anoche hizo con Cristiano Ronaldo y Rooney: pararlo todo. Pero él también tiene derecho a la gloria. Y para un futbolista no la hay mayor que participar en una Copa del Mundo. Almunia tiene un sueño legítimo y el tapón de Casillas, Reina y Diego López puede llevarle a aceptar el plan Capello. De ser así habría que aceptarlo, comprenderlo y no desearle suerte. Por lo menos si topa con España.

Cuando un portero está inspirado puede aburrir a cualquiera. Eso le pasó a Cristiano, que anoche parecía uno más. Eso, para otro jugador que se vea en una semifinal de la Champions, puede ser bastante. Pero para el Balón de Oro y FIFA Player es cosa menor. Toda Europa espera, es la verdad, un duelo en la final entre el Manchester United y el Barcelona. Lo espera por fútbol y por medir a Cristiano con Messi. Pero para eso los dos tienen que hacer un poquito más de lo que han hecho en estas semifinales. Cristiano, al menos, envió un trallazo al larguero. Fue un tiro de larga distancia, como el que coló por la escuadra en Oporto. Ese es su peligro: de nada saca algo.

El Manchester ganó con el gol de un defensa. Lo mereció. Porque el Arsenal no hizo nada. Wenger adelantó al capitán, Cesc Fábregas, más de lo debido y le quitó lo bueno que tiene: el último pase. Le cambió esa responsabilidad por la del gol. Pero Cesc es más de fabricar que de rematar. Para eso está Adebayor, un gran delantero centro que anoche no lo pareció. Cero tiros a puerta es su balance. Insuficiente.

Ahora falta la vuelta en Londres. El United viene mejor colocado y aspira a su segunda final consecutiva y puede que a su segundo título también consecutivo. En Roma esperan a Cristiano, a Cristiano Ronaldo, para medirle con el Barcelona. Duelo épico. De circo romano.