El portero del Atlético de Madrid Leo Franco calificó de "alcanzable" el objetivo de repetir plaza en Liga de Campeones para la próxima temporada, pues está "convencido" de que los rojiblancos van a terminar cuartos esta Liga.
"Yo estoy convencido de que vamos a acabar cuartos, se han acortado las posibilidades con las dos últimas derrotas, pero creo que el objetivo es alcanzable, siempre se habla de la palabra ''fracaso'', pero no creo que sea un fracaso ser quinto, cuando vienes todos los días a trabajar, pero sí es verdad que no se conseguiría el objetivo", comentó en rueda de prensa.
Sobre la visita a Riazor del domingo, el arquero argentino consideró que se trata de "un buen campo, lindo para jugar" y donde tendrán que "reaccionar frente a un equipo muy inteligente, ante el que será difícil jugar".
"A Coruña es un sitio ideal para poder volver a la buena línea, el equipo trabaja toda la semana para aislarse de todo lo de fuera y preparar el partido con todas las ganas, porque tenemos la obligación de ganar y es lo que vamos a buscar", avisó tocado en el orgullo.
Respecto a las críticas recibidas por la afición el pasado domingo durante la derrota ante el Osasuna, uno de los capitanes del vestuario ''colchonero'' aconsejó tranquilidad al resto de compañeros. "Cuando recibe críticas, el futbolista lo tiene que vivir de la misma manera que cuando te aplauden. Por ello, hay que mantener un equilibrio y saber manejarse en esos momentos, tanto cuando las cosas van bien como mal, según como vaya su trabajo", indicó.
"Está claro que todo lo que venga de la grada a favor va ayudar, pero hay que estar acostumbrado a jugar en todo tipo de circunstancias y en momentos complicados, por eso somos jugadores del Atlético", asumió.
Por otro lado, Leo Franco, que destacó "la igualdad de todos los equipos, perdiendo muchos partidos, salvo los dos que están en cabeza", no se mostró sorprendido porque se culpe a la defensa de las últimas derrotas ligueras ante Mallorca y Osasuna.
"Ya estamos acostumbrados, cuado se gana son los delanteros los responsables y cuando se pierde los defensores, es lo normal", afirmó justificando que "no se pueden lograr siempre partidos tan ofensivos como los que se hizo contra Barcelona o Villarreal".
El guardameta, que acaba contrato este verano, optó por aparcar su futuro hasta final de temporada para que "todo el mundo se centre en el objetivo que se planteó al principio de la temporada".
"Estamos como siempre, no ha habido cambios, tenemos negociaciones, pero las dos partes estamos tratando de tenerlo al margen, porque creemos que es es el momento del equipo y no de temas personales. Lo prefiero yo así también, porque quiero que el equipo no se distraiga con nada", concluyó.
