El Rayo se llevó los tres puntos de Ipurua gracias a un solitario gol de Piti, propiciado por un fallo garrafal del portero local, Roberto Pampín. Con este resultado, el conjunto que entrena Pepe Mel se coloca cuarto en la clasificación, a un punto del Hércules, que es quien cierra la zona de ascenso, mientras que el equipo armero pone pie y medio en Segunda B, al seguir vigésimo en la tabla, a cinco puntos de la permanencia.

"A perro flaco todo son pulgas". Eso es lo que deben pensar en Eibar después de ver lo acontecido en el terreno de juego de Ipurua, ya que el Rayo se llevó la victoria hacia la capital, aún siendo bastante inferior al equipo de Josu Uribe.

Durante todo el partido fue el Eibar quien tuvo la posesión del balón, mientras que el Rayo se limitó a esperar atrás al conjunto local, llegando en escasas ocasiones a las inmediaciones de la portería armera, gracias a varios contragolpes, principalmente llevados a cabo por medio de Collantes en la banda derecha. Pero tampoco el Eibar gozó de grandes ocasiones de gol, gracias al buen hacer de la seria zaga madrileña, que en todo momento mantuvo el orden y en ninguna ocasión se vio superada por los delanteros eibarreses.

En los primeros compases del encuentro, con ocasión de un pase atrás de la defensa azulgrana, cuando el despeje era, a priori, fácil para el portero, éste erró en el mismo y el balón le cayó a los pies de Piti, quien no desaprovechó la ocasión para colocar el balón en la misma escuadra, lejos del alcance del meta. Y aunque los hombres de Mel tuvieron un par de ocasiones más para haber sentenciado el encuentro, acabaron pidiendo la hora ante el asedio del Eibar sobre la portería defendida por Cobeño.

Uribe

"No tengo nada que reprochar a los jugadores. Estoy muy orgulloso de ellos, les doy un diez. Tengo la sensación de que si seguimos así, algún día la racha cambiará".

Mel

"En Eibar no había que jugar al fútbol, había que hacer otras cosas. Hemos tenido tres ocasiones clarísimas para el cero a dos. Hemos tenido que sufrir mucho".