El FC Barcelona está dispuesto a comprar más terrenos no urbanizables en el área metropolitana de Barcelona para compensar la pérdida de las hectáreas donde se asienta en el Miniestadi, terrenos en los que el club catalán desea que se modifique su categoría para convertirse en edificables. Fuentes de la directiva barcelonista, que se encargan de este proyecto urbanístico, apuntaron a EFE que esta sugerencia del ayuntamiento llega "bastante tarde", en una operación que "lleva parada tres años" y sugieren que "quizá lo tendrían que haber planteado mucho antes".
Desde el club se insiste en que no se entiende por qué el proyecto de reordenación de los terrenos donde se asienta el Miniestadi sigue encallado y no se le da una salida efectiva "cuando hemos cumplido con todos los plazos y todas las exigencias", apuntó una fuente de la directiva. De todas formas, el Barça aún no ha concretado de qué forma se compensará, si con la cesión de terrenos que tiene en propiedad en el área metropolitana de Barcelona o con la compra de hectáreas en este ámbito.
El presidente del Barcelona, Joan Laporta, también se ha pronunciado acerca de la sugerencia lanzada por el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, consistente en que el Barcelona debía compensar con más terrenos la obra que tiene proyectada en el Miniestadi, que serviría para financiar en parte la remodelación del Camp Nou. "El alcalde tiene razón. Toda reordenación debe estar condicionada a una serie de compensaciones y el Barcelona está en disposición de presentar las compensaciones que sean lógicas y normales. Ya lo tenemos hablado y confío que vaya por buen camino", aseveró el presidente barcelonista.
En un acto celebrado en Madrid, Hereu desveló por primera vez, aunque una fuente autorizada del consistorio ya lo apuntó a EFE hace unas semanas, que la remodelación de un espacio urbano en la ciudad "está vinculado a unas reglas de juego que expresan compensaciones", y que ello también afectaba al FC Barcelona. Laporta ha apuntado que el arquitecto británico Norman Foster, encargado de la remodelación del Camp Nou, está preocupado por la demora de la primera fase, la más administrativa, y que tiene la intención de llamar al alcalde para conocer directamente el estado de la situación.
La labor de Foster, concentrada en la remodelación del Camp Nou, está condicionada a que el Barça pueda explotar la gran parcela donde se encuentra el Miniestadi, un campo fútbol y otros de entrenamientos que han quedado casi en desuso debido a que la entidad catalana ya ha puesto en marcha la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí, donde todos los equipos de fútbol de la entidad han trasladado su actividad.
