Comentaba Granero la semana pasada que su equipo de aquí al final de Liga se iba a llevar a más de un enemigo por delante. Siete días después de hacer pública su profecía, el Alicante se cobró ayer a su primera víctima. Amarró el Tenerife un punto del Rico Pérez de milagro. Y lo hizo gracias a Nino y Alfaro, dos jugadores que tienen entre ceja y ceja llevar al combinado chicharrero a Primera.

Cuando el cuadro de Oltra saboreaba los tres puntos, el Alicante dio uno de los muchos coletazos que todavía le quedan por dar, independientemente de que al final logre o no la misión imposible que supone la salvación.

La historia del Tenerife en Alicante pudo acabar en tragedia sino llega a ser por Borja, que en el minuto 92 desperdició un mano a mano con Luis García que pudo significar el 3-2. Antes del reparto del botín, el combinado tinerfeño mostró sobre el Rico Pérez su candidatura al ascenso. El tridente formado por Kome, Alfaro y Nino no decepciona a nadie. De hecho, pocos equipos de la categoría atesoran tanta calidad y veneno en los metros finales, un espacio en el que el Tenerife se siente superior y ha cimentado su sueño. Primero fue Alfaro quien abrió la lata al aprovechar una asistencia de Nino. Y luego, fue el almeriense el que se interpuso con la cabeza a una volea que iba camino del córner. Pura intuición. En un abrir y cerrar de ojos, el Tenerife gobernaba el partido gracias al talento, a la pegada y a su dinámica. Por algo, el conjunto canario acumula ocho jornadas sin conocer la derrota.

El Alicante, incrédulo ante esta situación, se marchó al vestuario triste y decepcionado. Sobre todo porque Luis Gil y Rafa Jordá habían desaprovechado dos ocasiones de oro que si hubiesen caído en los pies del tridente canario hubiesen acabado en gol seguro.

Coqueteó el Tenerife con el resultado, y del 0-3 se pasó al 1-2. Jordá ganó por alto a Luis García y mandó el balón al fondo de la red, ante el intento fallido de Manolo Martínez por salvar el gol. Sólo ha sido un susto, pensó Oltra. Fue entonces cuando apareció la dignidad y el espíritu que Granero le ha dado a los suyos. Borja aprovechó un pase de Pedro y batió a Luis García. Al final, el duelo entre la fe y el talento también acabó en tablas.

Oltra: "Estos partidos hay que ganarlos"

"Lógicamente, lo que menos me ha gustado ha sido el resultado. Tuvimos la suerte de ponernos por delante y del 0-3 se pasó al 1-2. A pesar de la ventaja que teníamos en el resultado, en el descanso dije que no me estaba gustando el partido. Este tipo de choques hay que ganarlos. Ahora tenemos que levantar la cabeza y sobreponernos a este contratiempo. El Alicante le puso voluntad hasta el final y es un equipo muy bien trabajado".

Granero: "Este punto tiene mucho valor"

"El equipo está muy bien físicamente y lo ha demostrado. Si a eso le unimos la fe que tiene y que nunca baja la guardia, pasan cosas como esta. Damos por bueno el empate, sobre todo por la cuestión psicológica. El resultado en la primera parte fue abultado y en la segunda, nos pudieron matar, por eso damos por bueno el punto. Además, este empate tiene mucho valor porque enfrente había un equipo que apunta a Primera. El mensaje es que estamos vivos".