Es el día de la marmota. Últimamente, cada vez que se acerca un Atleti-Barça las circunstancias convierten al Madrid en teórico aliado rojiblanco. Hoy sucede de nuevo, con la remontada blanca pendiente de un inesperado zarpazo atlético, pero la depresión es tal en el Manzanares que ni Manolete ha comenzado la campaña por una derrota dulce (para él, claro).

El triste y afortunado empate con el Oporto en el partido más esperado en diez años ha abierto de par en par una caja de Pandora que ya estaba entornada. El Atleti es un alma en pena y Abel se está estrellando en el muro que nunca saltó Aguirre: si juegan las cuatro estrellas (Agüero, Forlán, Simao y Maxi) el equipo se parte, pero no se decide a quitar a los pesos pesados del vestuario. Así que, cuando ya no tiene más remedio, sienta a Kun.

No parece que hoy se atreva a repetir tras la tormenta del martes... Y hará bien, porque Agüero, aún lejos de su mejor momento, sigue siendo la mejor opción que tiene el Atleti de meterle mano al Barça de Guardiola que, por primera vez en el curso, titubea. Empate ante el Betis, derrota con el Espanyol e igualada en Lyon. Son resultados razonables para cualquiera menos para quien se ha instalado en la excelencia. Y la capacidad del Madrid para poner nerviosos a sus adversarios es digna de Hannibal Lecter. Una derrota blaugrana sería soltarle el bozal definitivamente.

La lógica es fan del Barça o, más concretamente, de cualquier equipo en el que juegue ese tal Messi. En su última visita al Calderón, en Copa, se despachó con un hat trick y una conexión tal con Alves que dio la sensación de que habrían goleado igual acompañados de nueve alevines. En vez de eso, sus socios son Xavi, Etoo, Iniesta, Henry... Y si vieron a Pablo y Ujfalusi contra el Oporto, entiendo su tentación de correr a apostar en internet antes de terminar esta previa, pero...

Pero, ¿qué es la lógica cuando de por medio anda el Atleti? A menudo, una anécdota. Y más le vale a Abel que ése sea hoy el caso, porque una derrota colocaría la Champions en una galaxia muy muy lejana. El Calderón espera que Kun acuda al rescate al estilo Han Solo para dar vida al Atleti y a la Liga.

Tanto Abel como Guardiola han ganado tres Atlético-Barça

Abel y Guardiola volverán a vivir un Atlético-Barcelona, pero esta vez desde los banquillos del Vicente Calderón. El entrenador de Velada ha jugado siete partidos entre rojiblancos y blaugranas en el estadio del Manzanares. En ellos cosechó tres victorias, tres derrotas y un empate. Unas cifras equilibradas. Además logró mantener la portería a cero en dos ocasiones: en la temporada 1989-90 (1-0) y en la 1994-95 (2-0). Por su parte, el técnico catalán ha jugado cinco partidos con la camiseta del Barcelona en el Calderón. Los resultados son tres victorias, una derrota y un empate. Ambos sólo coincidieron en la campaña 1992-93 que se saldó con un contundente 1-4.