"El 0-1 me ha aguado la fiesta de cumpleaños"

Pepe

"El 0-1 me ha aguado la fiesta de cumpleaños"

"El 0-1 me ha aguado la fiesta de cumpleaños"

Pepe cumplió ayer 26 años. Ya se ha consolidado como el pilar del Madrid y compartió confidencias con AS junto a las cuatro torres de la antigua Ciudad Deportiva.

Lo primero, ¡feliz 26º cumpleaños!

¡Gracias! Estoy pasando una de las épocas más felices de mi vida. Para este día ha venido toda la familia. Mi novia desde Oporto, mis padres desde Brasil. Estoy a gusto en mi casa de Las Rozas. No se puede pedir más. Estar tranquilo con la gente que quieres.

Bueno, y haber ganado al Liverpool...

¡Claro! Es lo único que me ha aguado la fiesta. No paro de pensar que podíamos haber ganado ese partido, que hicimos mucho más y que tomamos más riesgos. Sabíamos que iban a jugar muy defensivos, pero fue algo más que eso. Renunciaron a cualquier tipo de ataque y encima se acabaron llevando el partido.

¿El 0-1 es definitivo?

Por supuesto que no. Tenemos fútbol para ganar en Anfield y vamos a dejarnos la piel allí. El Madrid puede ganar en cualquier campo. Todos lo tenemos claro y, a pesar de la derrota y de que fue un palo muy duro, en la plantilla sigue habiendo optimismo.

¿Para la Liga o para la Champions?

Aún podemos ganar las dos. Un 0-1 es un resultado remontable. Y más por lo que se vio en el Bernabéu. En cuanto a la Liga, hay que ganar al Espanyol. No podemos despistarnos. Es la única manera de meterle presión al Barça. Además, hay que tener en cuenta que ellos jugarán después de nosotros.

¿No pudo el Madrid ir más a por el partido ante el Liverpool?

Es complicado. Le puedo asegurar que desde el principio lo intentamos, pero no fuimos capaces de encontrar el camino.

¿Un deseo para su cumpleaños?

Jugar todos los años que pueda en el Madrid.

Para eso tendrá que renovar su contrato. ¿Cómo está ese asunto?

Bueno, de momento no hay nada. He escuchado por ahí que el Madrid quería renovarme a pesar de que firmé por cinco años y que sólo han transcurrido dos.

Es normal, habrá ofertas por usted de buenos equipos.

(Risas). En serio, yo me olvido de eso. Estoy muy a gusto en el Madrid y agradecido a este club, que me dio la oportunidad de convertirme en un jugador grande. No tengo prisa. Estoy bien. Cuando llegue el momento, hablaremos.

La leyenda del central de los 30 millones ya quedó atrás.

Los comienzos fueron difíciles. Pero recibí el apoyo de todo el mundo, incluido el de la afición. Tengo que estar agradecido, son los mejores hinchas del mundo. Cannavaro, por ejemplo, que ha sido y es un ídolo para mí, tuvo muchos problemas al principio, cuando llegó. Yo no he sentido tanta presión. Cuando escucho que corean mi nombre en el Bernabéu me cuesta creerlo.

Dígame, ¿cómo se encontró defendiendo a Torres?

Estoy contento con el partido que hice. Mi objetivo era dejar que no me encarase en velocidad. Estuve tranquilo, confiado y creo que solventamos bien las pocas jugadas a la contra en las que nos llegaron.

¿Tenía órdenes de Juande de estar especialmente cerca de Torres?

¿En los balones parados?

No, en general.

No, todo dependía del lado al que se dejara caer. Habitualmente fue al mío.

Pues se equivocó. ¿Notó mucho que estaba jugando al 50% debido a la lesión?

Mire, la lesión fue justo al principio, en una entrada muy dura que me hace él a mí. Me pisa el pie y se tuerce el tobillo. Después de eso tuvo su mejor ocasión. Casi no llego a taparle y pudo disparar. Menos mal que Casillas acertó.

¿Cómo se ha llegado a este cambio tan grande con Juande?

La gente hablaba mucho, al principio, de que no jugábamos bien pero que ganábamos. Ahí está el cambio. Habíamos perdido la confianza y así la recuperamos. Eso es lo que quería el míster. Ahora notamos que la historia es diferente, que su mano se ha notado y estamos a gusto.

Cannavaro dijo que antes los jugadores pensaban que sólo se podía ganar con la camiseta.

No es tan así. El Madrid es un club con mucho prestigio y es normal que los demás equipos jueguen el partido de su vida ante nosotros. Ahora sabemos que ganamos los partidos por pelear dentro del campo. Yo noto que todo el mundo pelea, que estamos involucrados y esto es importante.

¿Qué ha aportado Lass?

Primero, mucho trabajo en el centro del campo. La baja de Diarra fue, particularmente para mí, muy importante. Lass es de las mismas características. Es un destructor eficiente. También hay que valorar la transferencia del juego que Lass y Gago están haciendo de la defensa a los delanteros.

¿Con el sistema de Juande ha variado la forma de jugar de Pepe?

No he notado mucho Lo que ha cambiado es nuestra manera de entrar en el campo. El incentivo que nos da el míster. No hay dos técnicos iguales. No es que Schuster fuera malo, pero en eso también se nota la mano de Juande.

Se le ve tan a gusto que a veces sube al ataque. ¿Le cuesta trabajo reprimirse?

(Risas). A mí siempre me gustó arrancar desde atrás. En el Oporto pude hacer algunos goles así. En el Madrid me he olvidado de esa faceta porque hay veces que el equipo se vuelca arriba y es importante mantener las posiciones.

¿Cómo recuerda el experimento del último partido con Portugal, en el que jugó en el centro del campo?

Queiroz habló conmigo y le dije que estaba dispuesto. Luego habló con el primer entrenador que tuve en Portugal, en el Marítimo, que fue quien me descubrió. Pidió información a Bengala y éste le dijo que yo había jugado con él en esa posición y que era efectivo. Recuerdo con cariño aquella época en la que me desarrollé como futbolista. Hacíamos muchos entrenamientos en la playa, en la arena, para fortalecer los músculos de las piernas. Y levantábamos pesas dentro del agua.

¿Jugó mucho de medio?

Una temporada entera.

¿Le ha sorprendido Juande como entrenador?

Ya lo conocía de cuando ganó la UEFA con el Sevilla. Es una persona seria. Nos trata cara a cara y eso es de agradecer. Lo demás viene por sí solo. Es un excelente entrenador.

Habla de motivación. ¿Cómo lo hace en los partidos?

Bueno, lo primero es que hay que hacerlo bien para no salir del once titular. Sabe tenernos alerta y sacar del equipo a los que no están bien.

¿Qué entrenador le ha motivado mejor a usted?

Sin duda, Felipao (Scolari). Era un maestro y trabajaba mucho el nivel psicológico. En la Eurocopa, por ejemplo, había muchos días que me despertaba y me había metido un mensaje por debajo de la puerta. Eso te hacía pensar.

¿Mensajes individuales?

Había de todo, muy variado, y muchas frases de escritores. A él le gustaba leer mucho y a veces nos enviaba extractos de escritores para que pensáramos en la vida, en que aquel momento era especial.

¿Y en lo personal, cómo vive los momentos previos a un partido?

Siempre duermo pensando en el rival. Visualizando el partido que quiero. Luego, justo antes del partido me suelo poner música muy fuerte.

¿Qué tipo de música?

Voy cambiando. Música española, brasileña...

¿Estudia a los delanteros?

Mire, suelo fijarme más en los partidos menos importantes. A Fernando Torres, por ejemplo, todos lo conocemos. Es más fácil cubrirlo que a otros que no se conocen tanto. Esos son los difíciles.

¿Cómo ve a Marcelo en su nueva posición?

Está feliz. Lo está haciendo bien. Yendo de lo simple a lo complicado y aprovechando la confianza que Juande le ha dado. Quiere estar mucho tiempo en el Madrid. Después de lo que le ha pasado, hay que valorar que ha sabido darle la vuelta a la situación.

¿A qué distancia debe estar el Barça cuando visite el Bernabéu para que ganar la Liga sea posible?

Parto del principio de que hay que ganarlo como sea, morir en el campo, porque nos jugaremos la Liga. Si la diferencia se quedara como está, ganando al Barça nos pondríamos a cuatro puntos a falta de cuatro partidos y todo podría pasar. Si hay suerte y la reducimos antes, mejor. Hay que aprovechar la situación.