Abel cumple el sueño de pisar la Champions

Liga de Campeones | Atlético de Madrid

Abel cumple el sueño de pisar la Champions

Abel cumple el sueño de pisar la Champions

En poco más de dos semanas Abel liquidará tres de los sueños de su vida: convertirse en técnico del Atlético, dirigirle en el Calderón y por último sentarse en el banquillo en un partido de Champions. Será su acceso a la historia rojiblanca ya que sólo otros siete técnicos lo han logrado.

Así, de golpe, en cosa de menos de quince días Abel Resino verá cumplido tres de sus sueños. El primero fue convertirse en técnico del Atlético, a ello le siguió sentarse como local en el banquillo del Calderón y el martes cumplirá uno que le quedó pendiente en su etapa como jugador. Se estrenará en la Liga de Campeones y formará parte de un pequeñísimo club que, hasta el momento, formaban otros siete entrenadores. Será el octavo técnico de la historia atlética en dirigir un partido de Copa de Europa.

Nunca pudo el de Velada catar la máxima competición continental como futbolista en ninguna de sus nueve temporadas como rojiblanco y ahora con apenas dos semanas como técnico cumplirá esa cuenta pendiente. Y además lo hará con el listón muy alto. Excluyendo a Aguirre, sólo uno de sus predecesores quedó apeado en octavos de final. Fue en la temporada 66-67, cuando el equipo dirigido por Otto Gloria cayó en esa ronda ante la Vojvodina. Por su parte, Daucik y Marcel Domingo llevaron al Atlético a semifinales, Luis Aragonés y Antic fueron apeados en los cuartos de final y Juan Carlos Lorenzo casi hace campeón al Atlético, pero al final el Bayern le birló la gloria. Será un gran reto para el recién estrenado técnico rojiblanco, pero la Liga también le va a plantear un mes exigente.

Objetivo.

Además de la eliminatoria de Champions, Abel encadenará desde el domingo cuatro partidos de Liga ante cuatro de los cinco rivales que el Atlético tiene delante. Los rojiblancos han fallado en su progresión y llegan a esta etapa reina fuera de los puestos de Champions. Ahora la misión es como mínimo terminar esos cuatro duelos sin perder distancia con los cuatro primeros a la espera de que, como sucedió en el primera vuelta, los enfrentamientos posteriores entre ellos les permitan enjugar la ventaja y conseguir el objetivo.