Nàstic y Celta firman un empate que no les sirve para el ascenso

Liga Adelante | Gimnástic 1 - Celta 1

Nàstic y Celta firman un empate que no les sirve para el ascenso

Gimnástic y Celta se repartieron los puntos en un partido en el que sólo hubo emoción en los instantes finales y cuyo resultado no sirve a ninguno de los dos equipos para poder acercarse a la lucha por el ascenso.

Los visitantes se adelantaron mediada la segunda mitad por medio de David Rodríguez mientras que los de Ferrando empataron poco después, gracias a Tortolero. Fue el Celta el que tomó las riendas del partido desde el principio, llevando la iniciativa y el peso del juego. El Nàstic se conformaba con robar cerca de su área y buscar con balones largos a sus delanteros. Y casi le sale bien, porque a los siete minutos uno de esos pases dejó completamente solo a José Mari, que no supo definir ante Notario.

Mucho peor fue la definición de Campano al cuarto de hora, al desperdiciar un claro penalti cometido sobre José Mari, tras ser empujado por Edu Moya. Notario acertó la dirección del esférico y evitó el que podría haber sido el primero de la tarde. El error dejó helados a los locales, aunque no le perdieron la cara al partido e incluso mejoraron su juego durante unos minutos. Pero las oportunidades brillaban por su ausencia. De hecho la más clara hasta la media hora fue para el Celta, aprovechando un error el rechace de Felip, que se hizo un lío con los pies, aunque la defensa pudo acabar despejando el peligro.

En la segunda mitad no cambió demasiado el panorama. El primer gol para el Celta pudo llegar a los ocho minutos tras una contra de Gilas por la derecha que sirvió para David Rodríguez, que entraba por el centro. El lanzamiento del delantero fue repelido por Felip cuando se cantaba el gol. Un minuto más tarde, un disparo lejano de Jordi Alba se estrellaba en el palo. Ambas ocasiones sirvieron para que los dos equipos se entonaran un poco, sin llegar a crear peligro pero al menos poniendo algo más de intensidad y velocidad al juego, sobre todo el conjunto de Pepe Murcia, que parecía más decidido a buscar la victoria con más ganas.

El Celta apretó lo suficiente como para abrir el marcador. La jugada fue larga, empezando por la derecha y acabando el balón en la izquierda, donde Dani chutó desde lejos. El balón llegó al centro de la defensa, donde estaba David, que empujaba al fondo de la red. Con el gol en contra, los locales se volcaron sobre la portería de Notario, mientras que los gallegos esperaban pacientes atrás a la espera de un contragolpe letal. Pero el balón parado hizo que los de Ferrando empataran rápido, gracias al remate de Tortolero tras un lanzamiento de esquina. El Nàstic insistió hasta el final, provocando numerosas llegadas a balón parado, pero sin suerte.