Al igual que los estudiantes reflejan algunos cambios en su carácter en epoca de exámenes, el presidente del Valladolid, Carlos Suárez, experimenta un cambio razonable en su forma de expresarse cuando se acerca el final de los períodos de fichajes. Es normal, sabe que puede decir pocas cosas que no incidan directamente en las operaciones abiertas por el club y que está obligado a ser cauto a la hora de hablar de nombres concretos.
Aún así, Suárez reconoció algunos términos que indican que la operación por hacerse con los servicios del delantero del Murcia, Iván Alonso, sigue abierta: "Si fuera pesimista al respecto, no me habría reunido el martes con el representante del jugador, pero somos muchas partes a ponernos de acuerdo y tengo que decir que es complicado. Sabemos que Iván Alonso nos podría dar mucho, que está perfectamente adaptado a España, que conoce la Primera División y que, como otros jugadores con los que tenemos contacto, responde al perfil que buscamos para reforzar la plantilla, pero haremos la operación que esté a nuestro alcance. La disposición es buena, pero el tema económico es complicado".
En este sentido, el presidente quiso dejar claro que el club no piensa pasarse del límite salarial impuesto en el vestuario en esta operación (el delantero cobra 900.000 euros al año en Murcia): "El problema es que nosotros somos un equipo que tenemos salarios muy por debajo de algunos equipos de Segunda y eso complica las cosas. Aquí hay una regla que impide que haya grandes diferencias económicas entre unos jugadores y otros y ni podemos, ni queremos quebrantar esa regla; ahí radica el mayor problema, no sólo en esta operación. Alguien puede pensar que la necesidad puede obligarte a hacer locuras, pero nosotros no lo vamos a hacer". El presidente confirmó que no sólo el Valladolid se ha reunido con el representante y padre del futbolista, sino que también ha mantenido contactos con la directiva del club rojillo: "Ya hablamos en su momento con el Murcia para saber cuál es la disposici saben que nosotros vamos de frente. Por otra parte, los jugadores saben que futbolistas como Pedro León o Sesma se están revalorizando en este equipo. Pero una cosa es que todos tengamos un objetivo común y otra que se acabe cerrando un fichaje".
Buena disposición.
No hay un calendario fijado ni reuniones previstas, aunque el presidente no cierra la puerta: "No hay reuniones previstas, pero el martes tampoco estaba previsto y nos tuvimos que mover con urgencia. Seguimos haciendo números y si tenemos que salir pitando a las diez de la noche, pues lo haremos".
Al respecto del rumor de que el Valladolid pudiera estar interesado en dos ex blanquivioletas como Aganzo y Pachón, el presidente indicó: "Son gente que han dejado un buen recuerdo aquí, pero no lo hemos mirado. El Rayo es el Rayo, aunque esté en Segunda".
