"Fue un momento de júbilo, de emociones. Un momento muy bonito con toda la gente volcada y nosotros agradeciéndoles todo; y lo que pasó fue sin darme cuenta. Fue un momento en el que se te va un poco ''la olla''", ha confesado el jugador vizcaíno una vez finalizado el entrenamiento vespertino de hoy de su equipo en Lezama, la habitual sesión de recuperación del día después de partido. Koikili se ha hecho con el puesto de titular en los últimos partidos después haberse pasado la primera mitad de la temporada sin contar apenas para su entrenador, Joaquín Caparrós.

El jugador de Otxandio ha asegurado que no tiene preferencias de cara al próximo rival copero, ya que considera tanto al Sevilla como al Valencia dos equipos "potentes" y difíciles de superar. Lo que si le parece relevante es poder jugar la vuelta en San Mamés. "La vuelta en casa nos da un plus a favor nuestro", ha considerado. También ha explicado que al Athletic le está siendo "complicado" cambiar "el chip" de un partido a otro en las últimas semanas, en las que está alternando partidos de Liga y Copa del Rey.

"Pero, como llevamos todo el mes de enero así nos estamos acostumbrando. Así que, aunque la semana que viene tenemos un partido importante (el de ida de semifinales de Copa, a domicilio), ahora hay que poner todas las fuerzas en el partido que viene, el del sábado ante el Málaga (en San Mamés)", ha apuntado. Para Koikili, "sumar tres puntos" ante un rival que "está haciendo una temporada muy bonita y se encuentra -6 puntos- por delante" del Athletic en la tabla clasificatoria, sería "muy importante" de cara a las aspiraciones del Athletic para lo que queda de temporada.

El equipo rojiblanco, que ha estado acompañado en la sesión de hoy por numeroso público en Lezama, realizará el último entrenamiento previo al choque ante el conjunto malacitano mañana viernes a puerta abierta en el mismo escenario y en horario habitual de las 10:30 horas.