Es para sacar pecho y llevar la cabeza alta. Pero Esteban Vigo, el hombre que inició la pretemporada en verano con sólo 12 futbolistas en su plantilla, mantiene la humildad. El milagro sigue escribiendo páginas y ayer, en un choque raro donde su equipo fue mejor que el Celta, el Xerez ató el título de campeón de invierno. A los locales se les puso muy pronto el partido de cara y después el juego perdió mucha intensidad. Los de Pepe Murcia no fueron capaces de remontar el infortunio de los dos goles iniciales y al final Momo y compañía salieron victoriosos ante un rival que nunca inquietó con insistencia al marco de Chema.

El Xerez salió mandando y con el rival esperando su momento. Y en el tanteo, una lesión de Roberto Lago habilitaba el camino del primer gol. En su carrera con Carlos Calvo, el lateral zurdo del Celta se rompió justo cuando su rival encaraba ya el vértice del área. Al final, el xerecista no se lo pensó, y en vez de parar la jugada mandó un centro certero a Momo que el canario recogió con soltura para rematar a gol. El tanto fue un premio a la paciencia de los azulinos y al nervio del extremo canario, que sigue siendo un ciclón cuando el partido está abierto.

En solo cinco minutos, el sino del partido cambiaba. Este fue el tiempo que pasó del primer al segundo gol. El Celta aumentaba su sensación de inferioridad frente al líder después de tragarse el 2-0 en una jugada poco afortunada. Peña despejó un saque de esquina y el rechace dio en un jugador xerecista. El balón se quedó muerto en el área y Aythami no perdonó, fusilando a Notario. A partir de ese momento, el equipo de Pepe Murcia cogió el mando del partido, pero los pases de Trashorras jamás encontraron rematador.

Rosada fue el que tuvo en su cabeza un gol que pudo reducir distancias, pero no era el día del conjunto gallego. Chema, en el último momento, metió la mano desviando el balón al larguero. Dinei también tuvo el 2-1 en un par de ocasiones y Calle se quedó cerca de aumentar distancias, al igual que Sarmiento. Al final los tres puntos se quedaron el Chapín. Y con ellos, el liderato. Mientras, el Celta frena en seco su progresión tras una semana maldita donde ha caído frente al Murcia y a este Xerez, que no le tiene vértigo a las alturas.

Esteban Vigo: "El Celta no pudo marcar"

"Ya comenté a lo largo de la semana que nos iba a venir un equipo difícil y complicado, que venía en una buena racha. Por eso, lo importante además del resultado que hemos conseguido es que no nos han hecho gol, que el Celta no ha podido marcar. En nuestro primer gol, Calvo me dice que él ya había ganado la línea y que centró sin darse cuenta de que el Largo se había lesionado".

Pepe Murcia: "Demasiado castigo"

"Ha sido demasiado castigo para lo que hemos hecho. El resultado ha venido marcado por los dos goles que nos marcaron en cinco minutos. En el primero se lesiona Lago, que se ve que no es 'cuentitis' pero Carlos Calvo entiende que debe seguir y allá cada uno con lo que hace. Y en el segundo pudo haber una mano dentro del área, pero tampoco estuvimos afortunados".

El detalle: el Xerez apoyó al padre coraje

Los azulinos salieron al campo portando camisetas que recordaban a la figura de Juan Holgado, hijo del 'Padre Coraje', quien detuvo el partido ante el Tenerife de hace 15 días.