Parecía intuir el indulto por la mañana, o quizá sólo quería abstraerse de todo lo que se está hablando sobre su salida. El caso es que Abbondanzieri se entrenó ayer con buen humor, bromeó con sus compañeros y por la tarde conoció que su deseo de despedirse de la afición el domingo podrá hacerse realidad. El Comité de Apelación le quitó la roja que vio en Soria y ahora la papeleta le queda a Víctor Muñoz, que deberá decidir entre él y Jacobo para medirse al Racing de Santander.

De todos modos, oficialmente aún no tiene por qué ser la despedida del Pato, aunque todo apunta a ello. Al cierre de esta edición, las negociaciones entre Boca y Getafe seguían abiertas y habían sufrido una pequeña variación. Ángel Torres ha decidido tomar las riendas y, desde ayer, Bianchi trata directamente con el presidente. Torres aprieta en los flecos y las garantías y aún no parecía dispuesto a aceptar el principio de acuerdo en torno a 300.000 euros y la fórmula de pago: su intención es que se ronden los 450.000 y Boca está en crisis económica.

Recambio de fuera. Mientras tanto, el director deportivo del club azulón, Toni Muñoz, sigue buscando un portero que pueda llegar en calidad de cedido al equipo hasta final de temporada. En España el mercado parece imposible y se sondean otras ligas.

En Argentina se da por hecho que Abbondanzieri será jugador de Boca los dos próximos años y que se marchará la próxima semana a la concentración del equipo. Al menos, con el perdón recibido por el meta argentino y su presencia en el choque ante el Racing, a Víctor Muñoz se le acaba un problema y no tendrá que tirar de la cantera, sino que podrá disponer de sus dos porteros profesionales.