Tras las vacaciones de navidad, el Calcio se puso de nuevo en movimiento con dos partidos adelantados a la jornada del sábado. La atracción estaba puesta en el partido que enfrentó al líder, el Inter de Milán, ante el Cagliari. El equipo local arriesgó en exceso con los tiempos de juego y se vio sorprendido en el marcador con un tanto de Acquafresca. Con el resultado desfavorable, Mourinho se la jugó con todo el ataque y tras una buena jugada de Crespo, Ibrahimovic rescató un punto que reabre de nuevo la liga italiana, a expensas de lo que haga mañana la Juventus.
Con un Inter bien asentado en los primeros minutos, aferrado a la presión de Cambiaso y dependiendo de la movilidad de Ibrahimovic, todo hacia presagiar un partido fácil para los azzurros. Pero la timidez del Cagliari fue decreciendo según pasaban los minutos y tomaron mayor protagonismo en la posesión del balón. De todas formas los de Mourinho tampoco hicieron méritos suficientes en el primer periodo para ponerse delante en el marcador. Tan sólo alguna internada de Figo por la banda izquierda y otro remate de cabeza de Julio Cruz, que incompresiblemente no vio ni portería, inquietaron al guardameta visitante.
La cara del equipo tenía que variar, debía imprimir mayor velocidad y ritmo de contragolpe y el técnico luso pensó en su compatriota Quaresma, que entró por Córdoba, cambiando de banda a Figo. Con los dos extremos portugueses, el Inter abrió el campo y el Cagliari lo acusó, optando por encerrarse en su campo esperando un contraataque inesperado.
Los minutos pasaban y el Inter bombardeaba al equipo visitante con balones colgados al área sin encontrar las cabezas de Zlatan ni Cruz. El nerviosismo asomaba en el estadio del líder al no poder ante el modesto Cagliari. Ni el cambio de banda de Figo y Quaresma, ni los desdobles de Zanetti rompían la telaraña defensiva. Mientras, los de Massimiliano Allegri no arriesgaban lo más mínimo, esperando una oportunidad para sorprender. La ocasión llegó tras un inoportuno resbalón del argentino Samuel, que dejó sólo a Acquafresca y éste batió de forma magistral al cancerbero, logrando su séptimo tanto de la temporada.
En busca de la reacción, Mourinho dio un vuelco al equipo y arriesgó con tres defensas y la entrada de Mancini y Crespo en detrimento de Figo y Samuel. Con todo el ataque sobre el campo, los interistas lograron el empate gracias una jugada personal del argentino Crespo y la definición de Ibrahimovic en boca de gol (min.77). Con tablas en el luminoso, los visitantes daban por bueno el resultado en casa del líder pero los azzurros no estaban por la labor de dejar escapar vivo a un Cagliari tocado en los últimos minutos, que bien podía haberse llevado el partido de no ser por dos fallos de Acquafresca.
Con un gol anulado en el tramo final a Muntari, los de Mourinho se acuestan con siete puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, la Juventus, a expensas de lo que haga mañana en casa ante el Siena.
El otro partido adelantado al sábado tuvo lugar en el Comunale Luigi Ferraris y enfrentó a dos equipos en diferente estado de forma. Por parte local, el Génova llegaba a la decimoctava jornada de liga en sexto puesto pero con la lesión del mejor artillero del conjunto genovés, Diego Milito. Aun así, el equipo dirigido por Gian Piero Gasperini no tuvo demasiados problemas para deshacerse de un Torino flojo que ya acumula seis derrotas consecutivas fuera de su estadio.
Hoy cayeron por un contundente 3-0. El marcador lo inauguró el defensor Giuseppe Biava en el minuto 18 y ya en el segundo periodo, Bosko Jankovic y el ex atlético Thiago Motta pusieron la puntilla a un Torino que se queda en los puestos bajos de la clasificación con sólo cuatro victorias y 15 puntos. Mucho mejor se queda el Génova, asentado en puestos UEFA, con los mismos puntos que la Fiorentina, cuarto, a expensas de lo que haga mañana el conjunto violeta ante el Lecce.
