"Estoy listo para el Madrid, pero espero mi momento"

Hugo Sánchez

"Estoy listo para el Madrid, pero espero mi momento"

"Estoy listo para el Madrid, pero espero mi momento"

Aparece por el túnel a las 15:00, cinco horas después de empezar a trabajar, pero su fuerza es el discurso, el poder de convicción. La vuelta de Hugo enciende la Liga.

Si le tuviera que poner un titular a su primer día como entrenador en España, ¿cuál sería?

Es difícil, porque cuando uno viene por primera vez a una aventura, lo primero que puede imaginar es que va a haber nervios, incertidumbre. Ilusión conseguida, así le pondría. Porque mi ilusión desde hace mucho tiempo era entrenar en el fútbol español. Así que quitándole el trabajo a ustedes, el titular de la entrevista sería: ilusión conseguida.

¿Qué se encontró de distinto en este banquillo donde está sentado respecto a su época como jugador? En ambiente, ritmo, estilo...

Con la frialdad que nos da el tiempo, hemos visto esta mañana (por ayer) con los jugadores la repetición del partido con equivocaciones y aciertos. Lo que menos me gustó fue la desconfianza que había antes del partido en el entorno, pero cuando me relacioné con el juego me gustó la entrega y la predisposición de los jugadores. Noté que todo el mundo saltaba y estaba implicado. Los que jugaban y los que estaban en el banquillo. Pero había ansiedad, necesidad de ganar. Ya lo hemos hablado (Hugo ha reunido a sus jugadores a las 10:30 horas y no ha terminado el entrenamiento con los suplentes hasta las 14:00. Una hora después, sale del vestuario. Sus largas sesiones empiezan a ser una costumbre).

Hizo casi toda su carrera en equipos poderosos. Ahora viene a Almería, un club modesto y menos acostumbrado a ganar. ¿Cómo lo va a asimilar?

Desde que me retiré como jugador, mi única ilusión era entrenar y para eso me preparé. En México he demostrado mi valía, pero aquí decían que no tenía experiencia en equipos de Primera División. Es un cliché, la idiosincrasia de aquí. Un peaje que tenía que pagar en España. Por eso no me dieron la alternativa de forma inmediata. Para venir al fútbol español hace falta más, decían. Cómo no voy a tener experiencia en el fútbol español si he sido de los extranjeros que más tiempo han jugado aquí y más logros han conseguido. Conozco mejor el fútbol español que el mexicano. Tuve que pagar derecho de piso, pero luego llegué a la selección. Pensé que iría a España después del Mundial, pero no ir a los Juegos Olímpicos con los Sub-23 me costó tener que esperar otra vez la oportunidad. Ahora sí me ha llegado y sé que es un reto importante para mí. Pero con la calidad que tienen mis jugadores, vamos a salir adelante.

Ha dicho en numerosas entrevistas que su referente era Luis. ¿Sigue siendo?

Sí, la referencia que tengo es Luis Aragonés. Pero es por la jerarquía, el prestigio y lo que me ha enseñado en la cancha y fuera de la cancha. Tengo que decir que tengo una amistad extraordinaria con él, que cada vez que hemos podido hemos comido y cenado juntos. Es una referencia, la más fuerte que tengo como entrenador. Es el técnico que más partidos y más años ha dirigido en este país. Quiero seguir sus huellas.

¿Sueña con poder crecer tanto como en su época de futbolista?

Sueño con triunfar, enseñar mi capacidad y poder demostrar que soy uno de los mejores técnicos del fútbol español y, por supuesto, en Europa. Así fue mi carrera como futbolista. Primero fui mejor jugador de México, luego en la zona (por la CONCACAF), más tarde estuve entre los mejores de todo el continente y luego me conocieron en todo el mundo. Y como entrenador, lo voy consiguiendo. Quiero recordar que estuve cuatro años en el Atlético de Madrid, tiempo necesario para demostrar mi capacidad hasta llamar la atención de los grandes. Quiero triunfar en el Almería y ver qué pasa en el futuro.

Seguro que le han llamado muchos viejos amigos de Madrid estos días. ¿Le ha sorprendido algún telefonazo?

No, porque la mayoría son amigos. No me sorprende su llamada porque la espero igual que cuando ellos vienen a México. Lo que sí me sorprende es el altísimo nivel de la Liga española. Es la mejor del mundo.

También ha dicho que nunca entrenaría al Barcelona. Eso lo mantendrá...

Es de sobra conocido. Primero, porque no creo que el Barcelona me invite a trabajar con ellos. Saben de mi ideología futbolística. Quiero triunfar en el fútbol español y quiero hacerlo en los equipos que me contraten. Por supuesto, uno de mis grandes objetivos es el Real Madrid.

Ha topado en Almería con Negredo. Zurdo como usted y más alto que usted pero menos flexible. Un pánzer.

Cada vez va habiendo menos jugadores como Negredo o como Solari (el suplente en el Almería). Buscas en España o en el mundo y ves que no hay muchos delanteros postes.

¿Es que quedan ya pocos Hugos por el mundo?

Pues hace tiempo que yo desaparecí como futbolista (risas). Espero encontrar más Negredos y Solaris, pero ya le digo que está difícil.

Es el único futbolista que ha estado en los tres equipos madrileños en Primera División. Hizo 234 goles en Liga. Estará orgulloso.

Es una gran satisfacción. Creo entender que hubo algún jugador danés que también estuvo en los tres equipos, pero jugó con en el Rayo en Segunda. Quedan anécdotas y recuerdos bonitos. Ahora he vuelto y quiero dejar una huella profunda como entrenador.

¿Hubo alguna posibilidad o soñó en algún momento con entrenar al Madrid cuando Calderón destituyó a Schuster?

Estoy listo desde hace tiempo para eso, pero estoy esperando mi momento. Tal vez no ha llegado aún, pero el presidente lo sabe. Ya saben que estoy en la Liga española y tal vez más de uno se esté arrepintiendo ahora por la desconfianza que mostró en su día.

Seguro que ya ha señalado en rojo en su calendario el Real Madrid-Almería. ¿Qué va a sentir cuando 80.000 personas le ovacionen el próximo 22 de marzo?

Es algo que como profesional tengo que valorar. Pero es que cada vez que vaya a un estadio donde jugase en mi época en activo vendrán recuerdos. Pero el Calderón, y sobre todo el Bernabéu, van a resultar distintos.

Haga de embajador y ojeador. Además de lo conocido (Guardado, Márquez, Omar Bravo), ¿qué tenemos aprovechable en México?

Un portero, Guillermo Ochoa. Es un chico joven por el que ya han llovido ofertas. Para los que lo vean luego, que sepan que hay portero para 15 años a muy buen nivel. El Manchester City lo quería y de momento no lo dejan salir del América. Pero jugará en Europa seguro. Luego está Magallón, un central regular que sale con el balón controlado como Rafa (por Márquez). Rafa tiene más carisma y liderazgo. De lo que menos hay son delanteros porque pasa como en España. Su sitio lo ocupan los extranjeros. Además de Guardado, las bandas están bien cubiertas con Fausto Pinto y Arce. Y luego está Israel Castro, que estuvo a punto de fichar por el Espanyol este verano.

Para quien piense que Hugo va a ser sólo carisma y nombre en el banquillo, ¿qué le diría?

Pues que salí como campeón dos veces en México, fui tercero en la Copa América como seleccionador y finalista de la Copa de Oro. Creo que está dicho todo, ¿no?

¿El Barça ya es campeón?

Ahora mismo el Barcelona está mereciendo estar ahí arriba, se ha estructurado bien. Todos saben que, si es cuestión de gustos, preferiría ver campeón al Real Madrid o al Atlético. Con permiso, claro, del Almería, que ahora es mi responsabilidad.

Ha tenido, entre otros, a los siguientes presidentes: Alfonso Cabeza, Ramón Mendoza, José María Ruiz Mateos. De todos los personajes, ¿con quién se queda?

Pues ahora mismo, el mejor presidente que he tenido es Alfonso García porque me ha dado la confianza. Ha conseguido que comience una aventura en la que voy de la mano con él.

Logroñés es señor gol al revés, se escribió en su día. Qué golazo aquella chilena...

Un colega de ustedes lo escribió así, luego al revés. ¡Y se leía igual! Me quedo con el recuerdo, el titular fue gracioso y el gol inolvidable, claro.

Una cosa está clara. Usted no ha llegado aquí en medio de la indiferencia.

Sólo puedo dar las gracias. Pienso que puedo aportarle muchísimas cosas al fútbol español.