Mahamadou Diarra estará de baja entre seis y nueve meses por una lesión grave en la rodilla. No volverá a los terrenos de juego hasta la pretemporada de la próxima campaña, lo mismo que Van Nistelrooy, que fue intervenido el pasado 13 de noviembre en Estados Unidos. El malí fue sometido ayer a una artroscopia diagnóstico-terapéutica en el hospital Sanitas-La Moraleja y se confirmaron los peores presagios. Diarra sufre una lesión condral de grado IV en el cóndilo femoral interno y externo y en la meseta tibial externa, más una rotura compleja en el menisco externo en el cuerno y cuerpo posterior, más osteófito periférico externo en el platillo tibial de la rodilla derecha.

Con Mali.

Son tres lesiones en una. Diarra acudió la semana pasada a Lyon para buscar una segunda opinión en el doctor Bertrand Sonnery-Cottet, del Centro Ortopédico Santy. Diarra estaba preocupado sobre todo por sus problemas en el cartílago y estos días ya le costaba trabajo pisar. Ahora llega el periodo más duro para él, ya que es la primera vez en su carrera que tendrá que estar de baja tanto tiempo.

Diarra se lesionó el 11 de octubre vistiendo la camiseta de su país. Fue en el partido Mali-Chad. Entonces, el diagnóstico fue una parameniscitis en la rodilla derecha con sinovitis. Volvió a jugar el partido de Copa ante el Real Unión el 30 de octubre y en un entrenamiento el pasado 30 de noviembre recayó. Tras varios estudios médicos, los doctores decidieron que lo mejor era que pasara por el quirófano.