Misión cumplida. El Valencia ya está en los dieciseisavos de final de la UEFA. A Emery la apuesta de anoche le salió redonda. Los blanquinegros necesitaban un empate y lo consiguieron ante el Brujas. Y lo hicieron, además, con un once plagado de habituales suplentes (salvo Marchena) e, incluso, con futbolistas que debutaron en esta temporada, como Curro Torres o el canterano Jaume, sin olvidar la presencia de Guaita bajo palos. El técnico vasco lo tenía claro. Con sólo 48 horas de margen para medirse mañana al Barcelona, por su cabeza sólo pasaba presentar un once completamente distinto al que se verá en el Camp Nou. Con Renan, Miguel, Albiol, Alexis (si se recupera a tiempo), Moretti, Albelda, Fernandes, Baraja, Joaquín, Mata y David Villa, la historia anoche en Mestalla podría haber sido bien distinta. Pero es que al Valencia le bastó con el 'plan B' para poner en aprietos al líder de la liga belga, que tampoco hizo méritos para mucho más. Se encontró con un tanto en la primera mitad, en una mala salida de Guaita y después se limitó a contener los ataques locales.

El partido, desde el primer minuto, tuvo control valencianista. Principalmente, gracias al descaro de Pablo Hernández. El canterano está aprovechando la UEFA para reivindicarse. Lo hizo la semana pasada ante el Rosenborg y repitió anoche contra el Brujas. Suyas fueron las mejores jugadas en la primera mitad, bien respaldado por una defensa que dio la talla (notable Curro Torres tras un largo periodo de inactividad) y con Viana intentando mover el balón.

En el conjunto belga, sólo aparecía Sonck, aunque tampoco sin profundidad. Sin embargo, los de Mathijssen se encontraron con el 0-1 con un remate de cabeza de Alcaraz tras un saque de falta en el que Guaita no midió bien la salida. Una lástima para el canterano, que sí estuvo más acertado en la segunda mitad. El Valencia no enloqueció con ese tanto en contra. Los ché tenían claro que el empate les valía y se lanzaron a por él. Fue más fácil con la entrada de Vicente. El de Benicalap nunca acusa haber estar parado unas semanas por una lesión. Salió y revolucionó por la banda izquierda. Así llegó el gol de Zigic, con un precioso remate de cabeza tras un saque de esquina. Otra diana que sumar a la pizarra de Emery y Carcedo.

El técnico movió el banquillo y también dio entrada a Albiol y Fernandes. Con algún titular más en el campo, el dominio fue absoluto para el Valencia, que mereció incluso la victoria, con un par de ocasiones de Pablo y Zigic. Pero ya no se movió el marcador. Un empate que asegura el pase de ronda y que permite jugarse el primer puesto de grupo en Saint-Etienne. Y, todo eso, con el once de gala pensando en la visita que rendirán mañana al Barcelona.