Malas noticias para el Atlético de cara al derbi de mañana. Agüero lo tiene muy complicado para jugar ante el Madrid. El delantero acabó lastimado tras el partido que Argentina jugó ante Chile el miércoles, con derrota de la albiceleste, encuentro en el que el rojiblanco disputó los noventa minutos.
En un primer momento, en el Atlético se pensó que el jugador podría haber sufrido una rotura fibrilar en su pierna derecha. Más tarde las noticias fueron algo mejores, aunque no del todo buenas. Los galenos de la selección argentina dialogaron con los médicos del Atlético y en principio parece que Agüero no sufre ninguna rotura, aunque sí una fuerte contractura muscular, de la que difícilmente se pueda recuperar para llegar a tiempo de jugar frente al Madrid. El futbolista acabó el encuentro ante Chile fatigado y en la tarde noche de ayer emprendía viaje de regreso a España. Las horas de avión tampoco ayudan a la recuperación de Kun.
Pruebas médicas.
Aún no se había determinado nada al respecto, pero es más que probable que al jugador se le haga alguna prueba médica hoy en Madrid para descartar males mayores. Pero aunque no haya rotura, Agüero lo tiene difícil para ser de la partida ante el conjunto blanco. Los servicios médicos del Atlético entienden que si Agüero juega puede estar expuesto a una rotura y perderse así varios partidos de competición. Lo más factible es que el Kun no juegue ante el Madrid, descanse, y así pueda estar a tope para el partido de Champions del miércoles ante el Liverpool. Ni el técnico, ni el cuerpo médico, ni los dirigentes quieren exponer al jugador ante el Madrid, por muy importante que sea este encuentro. La temporada prácticamente no ha hecho más que empezar y no quieren forzarle.
En el Atlético estaban ayer disgustados por las lesiones que los jugadores sufren cuando están con sus selecciones. Heitinga regresó tocado con Holanda y Forlán vino muy fatigado de la anterior convocatoria con Uruguay, lo que provocó que se rompiese ante el PSV el pasado 16 de septiembre. Y ahora Agüero no viene roto, pero casi. El jugador necesita descansar más que jugar.
