Cuatro enviados especiales (un directivo, dos ejecutivos y un preparador físico) no fueron suficiente para que el Barcelona pudiera esta vez con la habilidad negociadora de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Leo Messi seguirá teniendo que acudir a los partidos amistosos que dispute la selección albiceleste cada vez que Julio Grondona y los suyos lo citen, después de que el presidente de la AFA se pasara por el forro el acuerdo -verbal- al que llegó con el Barça para que el jugador pudiera participar en los Juegos Olímpicos de Pekín.
Antes de esa cita, el Tribunal de Arbitraje Deportivo, con sede en Lausana (Suiza), había dado la razón al Barça, que se negaba a ceder a Messi con el argumento de que los Juegos no entran en el calendario internacional de la FIFA. Luego, en un gesto de buena voluntad, Joan Laporta y los suyos accedieron a que el delantero participara con su selección, a cambio de que en el futuro no fuera convocado para partidos amistosos. El error del Barça fue creer en la palabra de Grondona y compañía y no exigirles un documento firmado.
Papel mojado. José Luis Meiszner, secretario técnico de Grondona, aseguró en RAC1 que él y el presidente se reunieron con Txiki Begiristain, el directivo Albert Perrín y el director de fútbol, Raúl Sanllehí, "y se ha dejado claro que las convocatorias de Messi se resolverán con sentido común, pero en ningún momento nos hemos comprometido a que Messi no vaya a jugar los partidos amistosos". "Esto no es un acto administrativo, así que no hay firmado ningún documento", explicó Meiszner.
De momento, no irá a Escocia
El 19 de noviembre, en Hampden, Argentina disputará el primer partido amistoso después de las diferencias entre el Barça y la AFA respecto de la convocatoria de Leo Messi. De momento, los emisarios que el club envió a Buenos Aires para ratificar el acuerdo regresan con la promesa verbal de que el delantero no será llamado para ese desplazamiento. El Escocia-Argentina quedará enmarcado entre la visita al Recreativo y el encuentro de Liga siguiente, en el Camp Nou ante el Getafe. Messi, mientras tanto, se ha mantenido al margen de este espinoso asunto, aunque se da por hecho que cuando el seleccionador lo convoque estará encantado de acudir.
