Los dos equipos salieron muy responsabilizados por la necesidad de puntos, por lo que apenas creaban juego y se limitaban a romper el poco que creaba el rival, sin bien el Elche llevaba la iniciativa ante un Celta que dejaba mucho campo al contrario.

A los 15 minutos, merced a esa mayor presencia ilicitana en la parcela rival, Miguel, marcaba en colaboración con un defensa visitante, que desvió la trayectoria del esférico, adelantando a su equipo. El gol espoleó al Celta, que sin hacer un juego vistoso, salió de la cueva y dominaba el centro del campo, aunque los ilicitanos, muy metidos en el partido, no daban concesiones a los de Pepe Murcia, que adolecían de pegada.

Tras unos primeros compases de tanteo en la reanudación, el Elche dispuso de dos ocasiones de gol, incluso en una de ellas Miguel anotó el segundo gol para los locales, que fue anulado por un más que dudoso fuera de juego del delantero asturiano.

En el minuto 53, el Celta, que pasó a dominar el partido, pudo empatar el partido, pero Willy, en una mano a mano con Dinei, acertó a abortar la ocasión viguesa, pero cinco minutos después, Trashorras de penalti logró el tanto del empate.

El tanto visitante 'descolocó' a los locales, que parecían atenazados por los nervios y la presión ante la necesidad de conseguir la primera victoria de la temporada, aunque seguía buscando la portería contraria, pero sin acierto.

El Celta aguantaba las acometidas de los locales, que se empleaban más con el corazón que con la cabeza, mientras que los ilicitanos, necesitados de la victoria, para empezar a mirar arriba, pero los goles no llegaron.