El entrenador del Barcelona, Josep Guardiola, prometió hoy que su equipo será "competitivo" en cualquier circunstancia, después de haber ganado los seis partidos que ha disputado, y en vísperas de recibir, mañana, al Boca Juniors en la 43ª edición del Trofeo Gamper. Con 29 goles a favor en seis partidos (cinco amistosos y uno oficial), el Barça ha arrancado la temporada a un extraordinario nivel que su entrenador espera mantener. "No tengo ninguna duda de que seremos competitivos en cualquier campo, aun sabiendo que estamos en el inicio y que hay cosas a mejorar".

El potencial de sus rivales, inferiores al Barça, no permite calibrar el verdadero estado del equipo, pero Guardiola se rebeló contra esa idea. "El partido de la previa de la Champions, por ejemplo, es complicado y mentiroso. Yo le doy valor porque sé lo difícil que es y además, aún no nos hemos clasificado. Aún debemos viajar a Polonia". Tan satisfecho como cauto con lo que ha ofrecido su equipo, Guardiola prepara el Gamper como una buena oportunidad de "seguir compitiendo" y de "probar cosas para seguir enganchando a la gente" con el objetivo "prioritario de rendir bien en la vuelta de la Champions y de empezar bien la Liga".

El entrenador azulgrana adelantó que ante el Boca Juniors apostará "por los que menos participaron" ante el Wisla en un partido que afronta "con la máxima seriedad ante un rival de prestigio internacional porque en el Barça no hay partidos amistosos o menos importantes". También se refirió Guardiola a la elección de los capitanes del equipo, que saldrán de la decisión del vestuario. Sin dar nombres, el entrenador trazó el perfil de la persona idónea para portar el brazalete, un jugador capaz de "asumir sin miedo los problemas" y de anteponer el colectivo a lo individual. "Si piensa en el club y en la institución, no se equivocará", aconsejó.

Ya acostumbrado a la expectación que acompaña al entrenador del Barça -"la genera el cargo, no yo, no es nada personal"-, Guardiola se resignó a que el ruido mediático incluya habitualmente asuntos extradeportivos. "Sé que en este club; tranquilidad, poca. Y no puedo pretender que la haya porque siempre se generan muchas noticias". Guardiola, además, aseguró que la "tendencia de muchos jugadores" a comparar el trabajo de sus entrenadores es engañosa y fácil de malinterpretar. Lo hizo valorando el currículum de su antecesor, Frank Rijkaard. "Hizo cosas extraordinarias que ojalá pudiéramos igualar. Simplemente son ciclos que se acaban y entre todos nos vamos adaptando", analizó.