El Elche ha depositado en la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) algo más de 550.000 euros para hacer frente a las denuncias que habían presentado ocho jugadores, que reclamaban el cobro de sus emolumentos.

La AFE hizo ayer pública la lista de los clubes morosos con sus futbolistas y en concreto anunció que debía una cantidad de 551.875,44 euros, que debía abonar antes del 31 de julio para evitar el descenso de categoría.

De las denuncias que habían presentado los jugadores, siete corresponden a la pasada temporada y una, la de Manolo Pérez, al ejercicio anterior.

Los jugadores que habían denunciado al Elche por el impago de sus emolumentos son Rubén Suárez, Diego Trotta, Noel Williams, Iago Iglesias, Joann Bouchard, Carlos Bellvís y Fabián Coelho.

En ese sentido, el presidente del Elche, José Sepulcre, ha asegurado que la entidad del Martínez Valero no tendrá problemas para mantener la categoría por el impago de las deudas con los jugadores.

El Elche tenía de plazo hasta mañana para hacer frente al pago de las denuncias que habían presentado los integrantes del plantel ilicitano que no llegaron a un acuerdo en la forma de cobro de los atrasos en concepto de fichas.

Vidal insiste en reforzar la delantera

En el aspecto deportivo, David Vidal, entrenador del Elche, aseguró, después del triunfo de su equipo (0-10) ante el Allariz, que está muy satisfecho con el rendimiento de sus jugadores aunque insistió en la necesidad de contratar a dos delanteros.

Pese a la efectividad que demostraron sus jugadores durante el partido, Vidal restó importancia al resultado por la inferior categoría de su rival.

"Aunque la prueba fue muy positiva, lo conseguimos contra un equipo de inferior categoría, que apenas ofreció oposición. La actitud y la voluntad de mis jugadores me pareció muy buena", destacó.

Vidal considera que, con respecto a la pasada campaña, han ganado "disparo desde la segunda línea, velocidad en los extremos y en otras cosas, como por ejemplo en talento, en mover la pelota más rápido, en músculo y en altura".

"Estoy muy contento", sentenció el preparador, que subrayó que ve a su equipo "demasiado bien, demasiado rápido, para haber trabajado una semana sólo" y abogó por "ir poco a poco, con precaución y no apretar tanto", ya que cree que "a veces" se pasa "de la raya".

Respecto a los refuerzos, Vidal apuntó que "es posible" que todavía lleguen algunos. "Tenemos dos habitaciones en el hotel de concentración preparadas para tres o cuatro jugadores", puntualizó.

"Nos hacen falta, sobre todo, dos delanteros, como mínimo, aunque estoy muy contento con la actitud, la voluntad y la técnica futbolística de Luis Doménech, al que conocía del año pasado y que si sigue así tiene muchas posibilidades de quedarse en la primera plantilla", apuntó.

"Espero que la dirección deportiva cierre alguno de las gestiones que tiene abiertas para traer los delanteros que necesitamos; nos cuesta trabajo maniobrar arriba. Todavía no tenemos noticias de los jugadores que tienen que llegar, ya que también necesitamos un lateral izquierdo y un extremo derecho", concluyó.