El estado de forma de Diarra y Robben asombra a Schuster

Primera | Real Madrid

El estado de forma de Diarra y Robben asombra a Schuster

El holandés se entrena horas extra

Robben más despacio. Sé que puedes dar más e ir más rápido, pero baja el ritmo" le decía ayer por la mañana Jordi García, uno de los preparadores físicos, al extremo holandés en las series de 600 metros que volvió a planificar Valter Di Salvo.

Y es que nadie puede parar el ímpetu de Robben en estos primeros días de trabajo en Austria. El holandés y Diarra son los dos jugadores que están dejando con la boca abierta a prensa, aficionados, compañeros e incluso a Schuster, que ayer comentaba con Manolo Ruiz el nivel físico que está mostrando el once madridista. Es tan bueno el estado de forma de los dos futbolistas, que ayer finalizaban las series físicas y a la hora de comprobar pulsaciones y frecuencia cardíaca máxima de ambos los dos están en niveles espectaculares. Es como si Diarra y Robben no estuvieran iniciando una pretemporada, sino que el nivel que están mostrando es de inicio de temporada.

El caso de Robben es para quitarse el sombrero. El extremo llega una hora antes al gimnasio para trabajar todos los días antes del inicio de la sesión. Y al finalizarla, como ayer, en la que la exigencia fue máxima en el plano físico, se calzó de nuevo las zapatillas y se marchó al gimnasio para seguir trabajando.

Ejemplo. "Es un trabajador incansable", dicen los recuperadores físicos del Madrid, que le ponen como ejemplo desde que desembarcó en la casa blanca. Y razón no les falta porque es de los primeros en llegar y de los últimos en terminar de entrenarse. Las lesiones de la temporada pasada han picado a un jugador que quiere que esta sea su temporada...

"Corred, que está la prensa..."

El buen rollo y las bromas entre los jugadores no faltan en los entrenamientos. Cuando ayer las piernas ya flaqueban por la paliza física, Heinze dijo: "Chicos, a ver quién llega primero que aquí están los de la prensa y lo están anotando todo". Por su parte, Cannavaro, que sigue entrenándose en solitario con Carlos Lalín le decía entre risas a Diarra: "Vamos Mahamadou, trabaja un poquito...".