Webb, árbitro en entredicho para un partido intrascendente

Webb, árbitro en entredicho para un partido intrascendente

Es más que probable que el Grecia-España de hoy sea el segundo y último partido de Howard Webb en esta Eurocopa. Su designación para el encuentro más intrascendente de la última jornada de la fase de grupos es una señal. No salió bien parado del Austria-Polonia, en el que concedió un gol en fuera juego y señaló un penalti en el último suspiro a favor del equipo anfitrión que sacó de sus casillas a Leo Beenhakker. La UEFA no olvida estas cosas a la hora de elegir los árbitros que continuarán en la fase final del torneo.

Howard Webb, en cualquier caso, no debe sentirse decepcionado. Para él ya es un éxito haber participado en esta Eurocopa al ocupar en el puesto que estaba destinado para su compatriota Michael Riley. Webb es árbitro internacional desde 2005 y tiene 36 años. Le quedan aún varias oportunidades para reivindicarse en torneos de esta enjundia.

Como el holandés Pieter Vink, el que dirigió el Suecia-España, Webb llegó a la Eurocopa con poca experiencia (apenas cinco partidos de la Liga de Campeones) y con ascenso sorprendente en el escalafón. Es de suponer que la UEFA disponga de árbitros más duchos a partir de cuartos de final.­