La selección entrena a puerta cerrada pero bajo la atenta mirada de la prensa

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La selección entrena a puerta cerrada pero bajo la atenta mirada de la prensa

La selección entrena a puerta cerrada pero bajo la atenta mirada de la prensa

La Selección ha vuelto al trabajo esta tarde después de dedicar la mañana al trabajo de recuperación.

A dos días del debut de España en la Eurocopa, el seleccionador, Luis Aragonés, ha decidido cerrar la puerta del entrenamiento y trabajar la táctica y la estrategia para medirse a Rusia sin invitados en la grada. Como es lógico, prensa y aficionados trataron de ver lo que ocurría sobre el césped subiéndose a las colinas que rodean el campo de entrenamiento, y, aunque en un principio y de forma educada la policía trato de impedir que nadie pudiera saber lo que ocurría en la sesión, finalemente tanto medios como aficionados han podido seguir desde la lejanía la práctica totalidad del entrenamiento.

Mañana tranquila

Antes, los internacionales se pusieron en manos de los fisios y pasaron la mañana haciendo trabajo de recuperación en el Spa de su hotel. La larga temporada de la que vienen todos los jugadores obliga a extremar las precauciones para evitar problemas físicos. Quizá ahí esté la explicación a los suaves entrenamientos de la Selección.

Aragonés es consciente de la importancia del primer partido en un campeonato como la Eurocopa y como reconoció en la concentración de Puente Viesgo, una derrota contra Rusia "sería un palo anímico importante". Por ello no quiere dejar ningún detalle al azar y ha buscado la tranquilidad que da la intimidad para trabajar la táctica que permita neutralizar el dinámico juego de Rusia. La ausencia de Arshavin y Pogrebnyak son un alivio para España, que deberá centrar toda su atención en el delantero Pavlyuchenko, del Spartak de Moscú y pretendido por el Real Madrid, y en las diagonales y llegadas desde atrás del centrocampista Zyrianov, reciente de campeón de la UEFA con el Zenit.

Por lo apuntado en el entrenamiento vespertino del sábado, España presentará un once formado por Casillas; Ramos, Puyol, Marchena, Capdevila; Senna; Iniesta, Xavi, Silva; Villa y Torres. A todos ellos entregó Luis el peto naranja, esa especie de pasaporte a la titularidad. Claro que en el entrenamiento previo a medirse a Estados Unidos en Santander nos enseñó una alineación que luego presentaba varios cambios cuando comenzó el encuentro. Esta vez, parece que Aragonés no juega al despiste y ha mostrado sus cartas. En cualquier caso, un poco de precaución nunca viene mal con el seleccionador.

Senna y Villa

Mejorar los movimientos en defensa, aumentar la velocidad en la circulación del balón y juntar las líneas del equipo para que Fernando Torres no esté tan aislado como en Santander son los detalles que más habrá que pulir. Para lograrlo se antoja básico el trabajo de dos hombres, Marcos Senna y David Villa.

Senna parece el elegido para actuar como mediocentro, un puesto fundamental, clave para que todas las piezas de la Selección encajen perfectamente. Enlace entre la defensa y el ataque, a él le corresponde efectuar con rapidez las transiciones ofensivas, trasladar el balón con velocidad hasta los cinco compañeros más ofensivos. Además, debe cubrir las subidas de los laterales, en especial las de Sergio Ramos por la derecha. Al mediocentro no se le están permitidos los errores tácticos.

La otra pieza básica en el dibujo de Aragonés es Villa. Recuperado del golpe que recibió de Puyol en Santander y que le impidió enfrentarse a Estados Unidos, el delantero del Valencia se exhibió en el partidillo de entrenamiento del sábado y en sus pies están depositadas muchas de las esperanzas de España en esta Eurocopa. Comparte con Torres la responsabilidad del gol, pero además tendrá la obligación de retrasarse hasta la zona de medios cuando el rival tenga el balón. Debe ser el mejor socio del Niño, el compañero que impida que Torres parezca un náufrago en una isla, como sucedió contra Estados Unidos. Aragonés apuntó el problema y Villa tiene que ser el encargado de resolverlo.