Cólera sin precedentes en el barcelonismo

Primera | Real Madrid

Cólera sin precedentes en el barcelonismo

Laporta anuncia a Guardiola como técnico para sofocar el incendio. Un grupo de socios presentará hoy una moción de censura

El momento colérico que se vive en el Barcelona contra su junta directiva no tiene precedentes. Ni en los últimos tiempos del nuñismo se conoció una situación igual. Entonces existía una oposición organizada, el Elefant Blau, que dirigía el entonces ignoto abogado Joan Laporta. Hoy es un clamor popular silvestre, nacido del profundo desencanto de una temporada de fracasos. Ayer, en un intento de sofocar el incendio, Laporta anunció a Pep Guardiola como nuevo entrenador, oficializando la decisión tomada por la Comisión Delegada del club el pasado lunes. Pero hoy, un grupo de socios presentará una moción de censura contra la junta. Lo lidera Oriol Giralt, el mismo que le ganó en los tribunales a Laporta una demanda que le obliga a adelantar las elecciones al año 2010. El éxito de la moción es dudoso. Para materializarse necesita recoger más de seis mil firmas de socios y sólo queda un partido en el Camp Nou, el del domingo. Se recogen ahí o deberán ir casa por casa: complicado. Pero es otro frente abierto en el incendio.

Y es que el Barça arde por los cuatro costados. Uno por cada gol del Madrid. Era inevitable. El barcelonismo echaba chispas, pero no contaba con la goleada del Bernabéu. Y más tras saber que su presidente vio un 0-5 y así lo soltó en la comida de directivos, previa al partido. Pasillo y goleada: demasié. ¡Laporta, dimisión! y ¡Jugadores mercenarios! fueron las consignas más repetidas en el tristísimo día después azulgrana. Porque también hay cera para los futbolistas. A unos, por omisión (Etoo y Deco), a otros por su papelón en Chamartín.

Es interesante repasar la cronología de los hechos. Un centenar de personas recibieron de madrugada a la expedición azulgrana en El Prat, a su vuelta del Bernabéu. Un silencio sobrecogedor les acompañó durante todo el vuelo. Al aterrizar, descalificaciones por doquier (menos a Rijkaard, al que ya daban por muerto), con Laporta en el centro de todas las iras. ¡Dimisión, dimisión! Gritos, malísimas caras.

Convocatoria SMS. Para entonces, y durante todo el día de ayer, mensajes de móvil convocando a una manifestación en la explanada del Camp Nou antes del partido del domingo con el Mallorca para protestar contra la junta y contra todo.

A primerísima hora de la mañana, los periódicos del ámbito barcelonista rugían como nunca. Sport teñía de negro su portada y les dedicaba a los futbolistas estas frases: "Habéis deshonrado la camiseta del Barça", "Muchos jugadores no merecen seguir ni un día más", "Tragedia final en Madrid, el equipo está a 17 puntos del líder y ha perdido el segundo puesto". Mundo Deportivo tituló "Vergüenza". "Un Barça en descomposición fue humillado desde el pasillo hasta el fin". Los periódicos de información general iban por el mismo camino y las tertulias en radio y televisión eran un lamento tragicómico, con Laporta en el punto de mira.

El grito del Bernabéu, "¡Laporta quédate!" hizo daño y para muchos barcelonistas fue la verdadera humillación: que el madridismo considere al presidente del Barça como un aliado no entraba en el guión. Su machada del mediodía, "el veo un 0-5", no se le perdona a este presidente que aparece ante su afición como fracasado y despistado a partes iguales.

Durante el día, la sensación de que la división en la junta es total. Ni les une Guardiola ni son una piña pensando en el futuro, hasta el punto que se comenta que a algún directivo de peso, el vicepresidente Soriano por ejemplo, una convocatoria adelantada de elecciones de no sofocarse el incendio no le parecería precisamente mal. La impresión de que una parte del laportismo dirigente se tiraría de la moto si se lo pusieran fácil campa por Barcelona. Sandro Rosell, ex vicepresidente deportivo y cada día más añorado por buena parte de los socios, manifestó ayer en un acto en ESADE: "No descarto presentarme a las elecciones". ¿Las intuye próximas? ¡Más madera!

Veto. La decisión de anunciar ayer el ascenso de Guardiola al banquillo del primer equipo se produjo en una conferencia de prensa de Laporta en la que no aceptó preguntas sobre su situación personal ni sobre Ronaldinho, ni tampoco otro asunto que no fuera el cambio de técnico que se producirá en cuanto acabe la Liga. El próximo capítulo en el guión será la presentación de futbolistas en cuanto sea posible. El más apetecido, Dani Alves. Agua para apagar el incendio.