Eduardo, que se produjo una fractura de tibia y peroné que le alejará de los terrenos de juego durante más de nueve meses, afirmó al periódico inglés ''News of the World'' que la lesión "fue tan grave que podía haber perdido la pierna", indicó.

"Siempre estaré agradecido a Gary por lo que hizo en la reducción del riesgo de mi pierna, eso fue decisivo", indicó el ariete de la selección croata.

Sobre si se recordaba algo del momento de la lesión, Eduardo dijo que no se acordaba "demasiado del momento del golpe", pero que si recuerda "el dolor" al ver su pie girado. "Mis sentidos volvieron cuando llegué al hospital", recordó Eduardo.

Asimismo, Eduardo fue visitado en el hospital por el defensa del Birminghan M.Taylor -autor de la lesión- y aceptó "sus disculpas", ya que le vio "realmente preocupado y fue sincero". "Quiero creer lo que dice Taylor y pensar que lo que sucedió fue un lamentable accidente", indicó Eduardo. A pesar de que destruyó su temporada, "sería increíble pensar que lo que hizo fue premeditado", recalcó.

El peor golpe

El delantero indicó "que no podía entender" como alguien podía hacer "una entrada así" en el minuto tres de partido y que no poder representar a Croacia en la Eurocopa 2008 fue "el peor golpe", pero dijo que "se sentía muy alentado" por el gran número de mensajes de apoyo recibidos por parte de gente de su club y de la selección croata.

"La Eurocopa de Austria y Suiza era un gran sueño para mí. Clasificarnos para este evento fue uno de los mejores momentos de mi vida, pero sólamente tengo 25 años y puedo jugar otras Eurocopas. Eso es lo que tengo en mi cabeza", manifestó el delantero del Arsenal.