¿Cómo se le quedó el cuerpo al ver al presidente de la FIFA poner en riesgo la Eurocopa y la Champions en la misma sala de trofeos del Real Madrid?
Al lado del todopoderoso presidente de la FIFA yo sólo soy un modesto secretario de Estado, pero sé que en España gobernamos los españoles. Aquí tenemos un grado de derecho y somos un país soberano.
¿Qué hará el Gobierno, y usted como su máxima autoridad en el Deporte, si la Federación Española de Fútbol no convoca elecciones antes del 31 de marzo, tal y como exigen las leyes españolas?
Cumplir con mi obligación y con mi trabajo, que es aplicar la ley. (Lissavetzky evita a propósito recordar que Villar puede ser inhabilitado si agota el plazo sin fijar fecha para los comicios).
Pero usted podría dejar de ser secretario de Estado si el PSOE pierde las elecciones generales del 9 de marzo. Quizá no tenga ocasión de hacer cumplir la ley, ¿no?
No. La ley está para cumplirla sea quien sea el partido que esté en el poder, el que gobierne. Lo que pase el 9 de marzo no cambiará las obligaciones electorales de las federaciones porque dependen de una ley en vigor, no de las urnas.
A muchos españoles nos entró la congoja cuando Blatter dijo que en seis horas podría dejar a España sin fútbol internacional,¿a usted no?
España jugará la Eurocopa en Austria y Suiza porque se lo ha ganado en el campo. Estoy seguro de ello.
Entonces, ¿a qué obedecen las amenazas de la FIFA?
No lo sé, porque el Código Electoral que pregona la FIFA es compatible ciento por ciento con la Ley del Deporte de España y con sus mecanismos electorales. En realidad no veo que haya contradicciones, y si las hay que me las digan.
Joseph Blatter afirmó que el fútbol tiene su propia norma y que funciona bien desde hace más de un siglo.
Y yo no lo pongo en duda. Aquí es cuando conviene recordar que en uno de los artículos de los Estatutos de la Federación, el cuatro me parece recordar, se dice que la FEF se regirá por las normas de la FIFA y de la UEFA, y siempre dentro del marco de la legislación española. Es lo que se pide.
El presidente de la FIFA habla de injerencias del Gobierno en las leyes del fútbol.
No tengo ningún interés en producirle daño al deporte español porque estoy en el cargo para todo lo contrario. Tampoco quiero entrar en confrontación con la FIFA. Repito que nuestras leyes son compatibles. Estoy de acuerdo con Blatter en que en España no hace falta llamar a los bomberos...
Blatter sugirió que el problema puede deberse a una incompatibilidad personal entre usted y Villar, más bien por su parte siento tener que decirle que me pareció entender...
Si este fuera el problema ya estaría resuelto. No quiero ser un estorbo... El problema es otro y está localizado.
¿Cuál es?
Es un hecho cierto que el fútbol español está dividido desde hace cuatro años. Esto no es un pecado. Pasa en los partidos políticos, en las instituciones, en las comunidades de vecinos, etc. Y cuando se dan estas diferencias, en los países democráticos hay un mecanismo infalible para salir de dudas: las elecciones.
La FIFA reclama su autonomía y la de sus federaciones adscritas porque dice que es una organización regulada, pero privada.
¿Cómo va a ser la FEF una entidad privada cuando ha recibido dinero de las quinielas y se han hecho 141 campos de césped artificial con el? Las Federaciones tienen unas competencias delegadas de la Administración Pública y unas obligaciones.
