El Consejo de Administración cerró ayer uno de los asuntos más espinosos que tenía entre manos desde el regreso de las vacaciones navideñas: el futuro de Savio y Riga. El brasileño llegó ayer a un acuerdo con el club para la rescisión de su contrato y, por tanto, no volverá a vestir la camiseta del Levante. El ex de la Real Sociedad, que había llegado tarde y se perdió siete sesiones de entrenamiento, acudió el pasado martes al club para pedir que le dejaran marchar y la respuesta que obtuvo es que debía renunciar a sus emolumentos y, aunque este extremo no lo confirmó la entidad, ésta se haría cargo de la deuda del brasileño con el Zaragoza por su fichaje con los azulgrana. El veterano atacante acudió ayer a las oficinas del Ciutat para comunicar que aceptaba la oferta y, por tanto, abandonaba la disciplina levantinista.

En cuanto a Riga, el delantero también acudió a las oficinas para presentar sus alegaciones por el retraso de tres días tras la Navidad. El ghanés ya le comunicó en su día al delegado del equipo que se retrasaría por unos problemas familiares (fallecimiento) y mostró sus pruebas a los consejeros, que aceptaron las explicaciones del punta. Además, Riga les dijo que no se había comunicado con De Biasi porque el año pasado, en una situación similar, llamó a Abel y el club le reprochó que se hubiera puesto en contacto con el técnico y no con el Consejo. La directiva le pidió al ghanés implicación porque es "un jugador muy importante" (versión del delantero) y que volviera a jugar. Además, le prometieron volver a hablar en junio.

El brasileño dice que se retira y la Real lo quiere

Savio Bortolini aseguró, a su salida de la reunión con el Consejo, que se retira del fútbol y se vuelve a Brasil. "Me voy a casa. Había muchos problemas en el Levante, aunque yo me he encontrado a gusto", manifestó el brasileño, que no siente "arrepentimiento por nada" de lo realizado -ni por su retraso de siete días- y dejó entrever que no habría fichado por el Levante de haber conocido sus problemas económicos. Mientras, este periódico pudo saber que la Real Sociedad, que ya lo tuvo en sus filas, le sigue los pasos al atacante. Habrá que estar atentos porque Savio ya dijo cuando se marchó del Zaragoza que, si no le dejaban irse, se retiraría y, posteriormente, fichó por la Real, que tuvo que abonar 500.000 euros a los maños como indemnización, mientras que la pena a pagar por su pase al Levante es de un millón.