Huracán Oliveira

Zaragoza 3 - Espanyol 3

Huracán Oliveira

Huracán Oliveira

Reuters

El delantero brasileño marcó dos goles en quince minutos que devuelven a la vida a un Zaragoza muy irregular, que suma su sexto partido sin ganar. El Espanyol acabó sufriendo tras ir ganando 1-3 pero suma once encuentros sin perder.

Quince minutos dan para mucho. Durante el primer cuarto de hora del partido se vivieron en las gradas de La Romareda muchos estados de ánimo: la alegría con el gol de Diego Milito, la desilusión con el empate de Tamudo, el enfado con el segundo del Espanyol, anotado por Valdo, y la ira hacia el banquillo cuando Zabaleta hacía el tercero en el tercer acercamiento del equipo de Barcelona. Tras sesenta minutos de fútbol, los quince últimos del encuentro sirvieron para que Oliveira marcara dos goles, salvara a su equipo de la derrota y a Víctor de la destitución.

El zarpazo de Milito en el minuto 5 daba esperanzas al Zaragoza, que aprovechó su primera ocasión en una jugada típica de este equipo, con un pase al hueco de D'Alessandro para la carrera y la definición del 'Príncipe'. Tras este gran inicio, el Zaragoza no estaba preparado para el vendaval que se le iba a venir encima.

Raúl Tamudo se reivindicó una vez más como uno de los mejores delanteros de los últimos diez años, marcando su gol número 100 del siglo XXI (el máximo artillero español del siglo). Se lo guisó con un control sublime y se lo comió con un sutil golpeo con la derecha que entró por la escuadra de César. En la jugada inmediatamente posterior, un disparo de Valdo entró por la escuadra opuesta, y sin tiempo para pensar en lo ocurrido, Zabaleta remató sin oposición un gran centro de Riera.

Tras seis partidos sin ganar y con este deprimente inicio de partido, la soga se estrechaba cada vez más en el cuello de Víctor Fernández. Su equipo intentó recuperarse de semejante zarandeo agarrando el balón y buscando con ahínco la meta de Kameni, que se lució en un par de intervenciones salvadoras para el Espanyol, muy cuidado de taparse atrás para intentar el contraataque que finiquitase el partido. Bien pudo llegar el cuarto de los catalanes, pero Luis García no apuntó bien tras una jugada de Tamudo que era medio gol.

El Zaragoza, mejor con diez

De colmar el vaso de la paciencia zaragocista se encargó Peter Luccin, desaparecido durante el partido y que se ganó la tarjeta roja tras una entrada criminal sobre Riera. Lizondo Cortés no tuvo más remedio que expulsar al mediocentro francés, que dejó a su equipo en inferioridad para toda la segunda parte.

El Zaragoza no se rindió pese al rosario de dificultades que se le presentaron en la tarde de hoy, y durante los primeros minutos del segundo tiempo se acercó con bastante peligro a la portería espanyolista. Mientras, la defensa visitante se manejó muy bien para frenar las acometidas mañas, que venían sobre todo a cargo de un activo Aimar y de la lucha de Sergio García.

Tuvo que ser Oliveira, que había entrado por Diogo, el que diera la vuelta al partido. Primero, con un zurdazo en el minuto 80, y nueve minutos después con un derechazo que salvó a Víctor Fernández de la quema. Tras asediar al Espanyol durante toda la segunda mitad con un hombre menos, un suplente de lujo permitió al Zaragoza salir de su estadio con un punto. El Espanyol dejó escapar la victoria y con ella una plaza de Liga de Campeones.