El Real Madrid recibe esta tarde a uno de los clubes más sensatos de Primera División: el Mallorca. Eso, además de indicar saneamiento económico, deportivo y espiritual, representa una señal de peligro. Porque el Mallorca, independientemente de otros méritos, juega bien. Y ese recuerdo suele dejar en cada una de sus visitas al Bernabéu. En la última, en la jornada que cerraba la pasada Liga y decidía al campeón, fue por delante en el marcador hasta el minuto 63, momento en que el Madrid se desmelenó e inició una de sus heroicas remontadas, ustedes recordarán.
No obstante, no acertaríamos si dijéramos que el Mallorca es un equipo de perfil bajo. De hecho, hoy saltará al campo con un portero y un mediocentro de River (Lux y Pereyra), un campeón de Europa absoluto (Basinas), dos campeones del mundo Sub-20 (Ibagaza y Varela) y un internacional español que estrenará mañana concentración, Dani Güiza. Todo ello, sin hablar del venezolano Arango, el mejor futbolista del equipo la pasada temporada, o sin citar a Webó, el otro gran fi chaje, que no ha jugado desde el segundo partido de Liga (fractura de un dedo del pie) y que ayer fue convocado de nuevo. No es poco, como se ve. Se podría decir que Gregorio Manzano ha propiciado una reunión clandestina de buenos futbolistas, con logros poco reconocidos o casi olvidados. Y quién sabe si esa revolución discreta podría culminar esta temporada. Dependerá de que el equipo no pierda la concentración (cayó 0-2 contra el Valencia en la pasada jornada) y de que la plantilla no se vea afectada por los egos individuales. En este último caso apunto a Jonás Gutiérrez, un futbolista interesante (e interesado) que se ha declarado en rebeldía porque desea ser traspasado al Portsmouth. Él se lo pierde.
Aunque parece que no será titular, entre las joyas que cultiva el Mallorca hay un ex madridista de nombre Borja Valero, campeón de Europa Sub- 19. Ante la pregunta de rigor, el muchacho ya ha anunciado que si marca un gol lo festejará, y me consta que su celebración podría ser absolutamente novedosa y radical, un verdadero shock en el estilismo moderno, pues el joven, en lugar de hacer la carretilla, el chupete o la peonza, podría limitarse a saltar con los brazos en alto. Sería un regreso a los clásicos y, en concreto, un homenaje a Fifirichi (el madridista Enrique Mateos), que fue inmortalizado después de marcar al Manchester United (1957) con una foto que evoca el saludo de un actor ante la ovación del público.
Recompuesto el ánimo después de la buena imagen en Grecia, el Madrid se presenta con novedades. Las bajas por sanción de Sergio Ramos y Guti exigen al equipo otra vuelta de tuerca, pues le dejan sin su principal organizador (ya faltó en Atenas) y sin uno de los motores, quizá el más importante. Sobre el terreno de juego eso se traduce en la entrada del joven Torres en el lateral. Salgado, la otra opción para el puesto, no ha sido incluido en la convocatoria por motivos técnicos. Entretanto, el centro del campo repetirá con Gago y Diarra en el pivote, y con Sneijder como lanzador desde una banda. El dibujo es en escorzo y olvida las alas, pero funcionó contra Olympiacos.
Heinze, por cierto, se confirma en el centro de la defensa junto a Cannavaro, quien ha recibido una nueva consideración esta misma semana: el sindicato de futbolistas de la FIFA lo ha elegido en el once ideal de la pasada temporada. Si pensamos que han votado 44.000 jugadores sólo nos queda concluir que los ciegos somos nosotros o ellos no tienen televisión o los centrales del mundo se derriten como el polo norte.
Pepe. Al hilo de lo centrales, como se esperaba, Pepe regresó a la lista, de la que sin embargo se cayó Balboa. Ambos tuvieron un altercado en el entrenamiento del viernes (diálogo con tortas) y el canterano ha sido invitado a refl exionar, que es como castigan los padres modernos (con discutibles resultados). Higuaín, ya recuperado de sus molestias musculares, también entró en la convocatoria.
El encuentro apetece por más motivos que los puramente crematísticos (los puntos y la clasificación). Reúne, por ejemplo, a dos estupendos delanteros nacionales, uno que fue de la Selección y otro que lo será mañana. Si los goles de Raúl (5) siempre se entienden como una reivindicación, hoy tendrán más mensaje si cabe. Y la situación afecta también a Güiza (6), que quedaría en mal lugar de asistir a una exhibición del capitán madridista.
El Madrid, que ha ganado todos sus partidos en casa, estrena locutor en la megafonía del estadio, lo que no pasaría de anécdota si no fuera porque existe el terrible riesgo de pasar del ambiente catedralicio del Bernabéu al popular perrito piloto. Confiemos en que la moderación se imponga.
El detalle: Manzano no habló en Madrid porque se prefería a Güiza
Manzano siempre da una conferencia de prensa en las ciudades a donde viaja el Mallorca, mientras que los jugadores tienen prohibido hablar desde que comienza la concentración. Ayer todo estaba preparado para que el técnico hablara, pero algunos medios pidieron a Güiza. El jefe de prensa Héctor Romero explicó que no podía comparecer, los medios dijeron que no querían a Manzano, que ya estaba en a sala, y todo quedó suspendido...
