Adrián, hijo del mítico Míchel, militó el pasado año en el filial del Real Madrid, que finalmente no pudo mantener la categoría en segunda división.

Durante esta temporada, el interior realizó la pretemporada con el equipo blanco ante la falta de zurdos en la plantilla, pero el técnico Bernd Schuster apenas le ofreció oportunidades.

Después de los fichajes de Drenthe y sobre todo Robben, el flanco izquierdo parece bien cubierto y la dirección deportiva del Real Madrid ha decidido ceder al futbolista para que cuente con minutos en un equipo de Segunda, pero con claras aspiraciones de ascenso.