El técnico del Real Madrid, Fabio Capello, tiene claro que su equipo juega mañana una nueva "final", pero aseguró que en el vestuario no hay "euforia" sino muchas "ganas" de sumar una victoria que les acerque el título.

Reconoce que "preparar un partido tan importante como éste en un día es difícil", debido a las ausencias de los internacionales, pero se mostró satisfecho con la labor del grupo. "Han regresado con muchas ganas todos. Hemos trabajo y tengo confianza en que mañana vamos a hacer un buen partido", deseó.

La victoria es obligada, pero el italiano no quiere cargar de presión extra a los suyos, que ya está concienciados de la trascendencia del choque. "A veces, presionando mucho puedes encontrar el resultado que no deseas, así que igual hay que dejarlos más tranquilo. Ellos lo saben, siempre hablan de estos temas, por eso me han gustado cosas que he visto hoy", expresó.

Personalmente, está "trabajando con ilusión y ganas" porque si no tuviera tendría que "jubilarse", al tiempo que no quiere fijarse en lo que suceda en los partidos del Camp Nou y Mallorca. "Nosotros debemos seguir en la misma línea, sabiendo que para nosotros es una final, no vamos a pensar en los otros o no iríamos bien", consideró.