El líder sube dos meses antes de concluir la Liga

Segunda | Tenerife 0 - Valladolid 2

El líder sube dos meses antes de concluir la Liga

El líder sube dos meses antes de concluir la Liga

Chema Díaz

El equipo que entrena José Luis Mendilibar es el conjunto menos goleado de segunda, con 33 goles, y el más realizador, con 55.

El Real Valladolid ha conseguido el ascenso a Primera División tras ganar en Tenerife (0-2) y encadenar la mejor secuencia de resultados de toda su historia al sumar veintiocho partidos consecutivos sin perder (casi siete meses invicto), lo que le ha permitido alcanzar su objetivo dos meses ante de concluir la temporada.

De récord en récord

El equipo que entrena José Luis Mendilibar es el conjunto menos goleado de segunda, con 33 goles, y el más realizador, con 55, así que además de haber conseguido el ascenso tiene en sus filas al principal candidato al Pichichi, Joseba Llorente, y al portero que lucha por el Trofeo Zamora, Alberto López.

El récord de puntos en la categoría, que hasta ahora estaba en poder del Alavés, con 82 puntos, también parece que es cuestión de tiempo, ya que el equipo vallisoletano se ha convertido en "una roca" de la mano de un entrenador, José Luis Mendilibar (Zaldibar, Vizcaya 1961), que ahora mismo es un héroe en Valladolid.

Y es que tras varias experiencias negativas con técnicos que, en absoluto, cumplieron sus objetivos, como Fernando Vázquez, Sergio Kresic y Marcos Alonso, todos ellos destituidos, Mendilibar, cesado la pasada temporada en el Athletic de Bilbao, ha venido a dar la razón a quienes veían en él un "diamante" tras el extraordinario papel que hizo con el Eibar durante la campaña 2004/2005, en la que estuvo a punto de ascender al conjunto armero con Kike Mateo, Garitano, Silva y el hoy blanquivioleta Llorente como estandartes.

Mendilibar, clave

En este Valladolid se ha notado, y mucho, la mano del entrenador. Cuando un equipo está trabajado se cambian las piezas y el bloque sigue funcionando. Eso es lo que ha sucedido este año y ocurrió también con el último técnico que triunfó plenamente en Valladolid, el chileno Vicente Cantatore.

Y es que desde el recordado "Europucela" de Cantatore, aquel Valladolid que se clasificó para la Copa de la UEFA en la temporada 1996/97 no se había producido tan buena sintonía entre la grada, el banquillo y los jugadores.

A la hora de buscar claves, el auténtico alma del Valladolid este año se encuentra precisamente en el banquillo, ya que Mendilibar ha conseguido que el equipo sea un bloque y presione como tal, al margen de quien juegue, pues la plantilla ha rendido al mismo nivel, altísimo, tanto en la Copa del Rey, con los suplentes, como en la competición liguera.

Al margen de la inspiración goleadora de Joseba Llorente, máximo artillero de la categoría, el éxito de este Real Valladolid arrollador se ha basado, entre otras muchas virtudes, en dos parejas de jugadores que le han dado la consistencia que no tenía en otras temporadas.

Buena defensa

Se trata de la dupla de medios centros, formada por Borja y Alvaro Rubio, y la de centrales, con Bea o García Calvo y un Baraja sorprendente que al igual que sucedió con el argentino Heinze, también lateral, ha sido todo un descubrimiento al pasar al centro de la zaga.

Dicen los especialistas que jugador bueno se ve pronto y lo mismo ha sucedido con este equipo que ya en la primera jornada ante el Sporting de Gijón (1-3) se reveló como un equipo solidario, que presionaba como un bloque y que poco tenía que ver con ese Valladolid que se fue diluyendo en las dos últimas campañas y que en la última se hundió en la mediocridad, jugándose el descenso en las últimas jornadas y con ello, la supervivencia del club.

Disfrutar y ganar

Decía Cantatore que en esto del fútbol "sólo se divierte el que gana", pues bien; en el Real Valladolid han disfrutando y están disfrutando todos de la fiesta, hasta el futbolista que menos juega o quienes en verano estaban con un pie fuera de la entidad.

Para terminar, hay que reflejar la elocuencia de los números. El Real Valladolid, en sus setenta y ocho años de historia, no presentaba un secuencia de resultados tan espectacular desde la temporada 1946-47.

El club de Zorrilla subió a la máxima categoría del fútbol español por primera vez en la campaña 1947-48, con una plantilla en la que destacaban Busquets, Soler, Torquemada, Coque, Vaquero, Lasala y Ortega.

Sin embargo, lo de esta temporada no tiene precedentes. Por el momento, son veintitrés victorias, tres derrotas y ocho empates. Ahora el objetivo es ser campeones.