El mexicano Javier Aguirre, entrenador del Atlético de Madrid, afirmó hoy que su equipo debe salir el próximo domingo frente al Levante como si fuera el "último partido" de la temporada y apuntó, sobre su renovación, que "ni siquiera es un tema secundario, sino terciario" en este momento.

"Les he preguntado qué ha pasado y les he sacado desde dentro qué errores podrían haber cometido los jugadores, qué circunstancias podrían haber pesado en el ánimo del equipo o qué cosas fueron obstáculos para que se llegara a feliz término. Y he intentado cambiar algunas dinámicas y algunas cosas", añadió.

La conclusión de esas conversaciones, según Aguirre, ha sido: "Si no competimos partido a partido, si no estamos concentrados o si no tenemos gran actitud nos puede ganar cualquier equipo, porque la Liga española está muy igualada. Y entonces les pedí que aún no piensen en su futuro, que no piensen ni siquiera dos partidos más allá, que piensen en el domingo y que se dejen la vida".

Por eso, el técnico recalcó que las "únicas cuentas" que hace el vestuario rojiblanco son llegar el próximo domingo a los 50 puntos. "Hasta ahí los jugadores y yo sí lo hemos hablado. Sería bueno, a falta de ocho jornadas, que el equipo tuviera 50 puntos. Sería muy, muy bueno, porque el año pasado y el anterior estuvo en 52 y hace dos en 55. Sería un paso muy importante para llegar a Europa", dijo.

Y eso pasa por un triunfo ante el Levante, un rival que, como recordó, ya ganó al Atlético esta campaña en la Copa del Rey (0-1). "Pero mas allá de la calidad de sus jugadores, Abel es un técnico que conoce esta casa, que sabe como se mueven las cosas, la gente, la afición y querrá ganar el partido. Ya lo ha dicho", apuntó.

"En ese sentido -agregó- espero un partido muy disputado ante un rival muy mentalizado. Mi equipo, si no está a la altura de las circunstancias en actitud, va a sufrir mucho. Les he pedido máxima concentración, máxima actitud, querer ganar y, si encima jugamos mejor y agradamos, pues ya sería un domingo completo".

Cosas que cambiaría

Aguirre reconoció que hay algunas cosas que no le gustan de su equipo: "Hemos sido, me incluyo yo, irregulares. Hemos sido capaces de hacer extraordinarios 20 minutos y luego regalarle la pelota al rival, desconcentrarnos y que nos marquen un gol. Después, otra vez recomponernos un poco y quince minutos muy buenos".

El técnico también citó estadísticas, que, según confesó, saca de internet, como la posesión del balón. "Llevamos 29 partidos y en 27 hemos tenido más que el rival. Sólo dos tuvieron la pelota más que nosotros, uno fue el Barcelona en el Camp Nou y otro el Villarreal. En el resto hemos tenido mucho más porcentaje", afirmó.

"El jugador está cómodo con el balón, pero muchas acciones con la pelota en nuestro campo han terminado dentro de la red. Y eso, de repente, te genera dudas y dices que ya no intenten salir jugando como en Zaragoza, que la peguen en largo, junten al equipo y la jueguen como casi todos. Den la pelota al rival y esperen, pero esa es la que menos nos gusta", indicó.

El técnico, aún así, destacó que su equipo defiende "muy bien en general". "No sólo es labor de los cuatro de atrás más el arquero, sino desde Torres, ''Kun'' y Mista. El primero que la pierde es el que debe intentar recuperarla. El equipo defensivamente ha sido más regular que ofensivamente", señaló.

Aguirre, a nivel personal, también habló de su continuidad: "Es un tema que ni siquiera es secundario, sino terciario. No nos interesa ni a mí ni al club hablar de ello, porque sabemos que vamos a sentarnos en dos minutos y lo vamos a arreglar para seguir o para no hacerlo. No tiene en este momento cabida en el equipo. No es un tema que lo tenga ni siquiera pensado".

El técnico admitió que lleva "tiempo" hacer un equipo con un entrenador nuevo y ocho o diez fichajes, como esta campaña. "Además, sucedieron las lesiones y fue un arranque complicado. Hoy no es pretexto bajo ninguna circunstancia", indicó.

"Viendo que hemos cometido errores y hemos sido irregulares, nos ha permitido estar 21 semanas en Europa. Algo ha mantenido el equipo ahí, no sé si una mística, amor propio, de repente buen juego, la fortuna... pero el equipo tiene mérito donde está. Lo que pasa es que faltan nueve jornadas, ese es el problema o la gran ilusión que tenemos todos".