No debe dormir muy tranquilo Joan Laporta, pero motivos no le faltan. Las cosas no le acaban de salir bien. Ahí van las argumentaciones: de los siete títulos a los que aspiraba el Barça el pasado mes de julio, ya sólo puede conseguir dos (Liga y Copa del Rey); la sobreprotección a un futbolista de la plantilla (Samuel Etoo) ha hecho que el resto del grupo lo mire con otros ojos; y para ir acabando el presidente del Barça (mejor dicho, su cuñado, Alejando Echevarría) está al corriente de una serie de reuniones privadas que se están llevando a cabo, en la capital catalana la mayoría de veces. ¿Qué se pretende? Un cambio de política, evidentemente.
Este periódico ha podido saber, de fuentes contrastadas, que gente de peso con empresas solventes están moviendo ficha, preocupados por la inquietante marcha institucional de la entidad azulgrana. No tienen prisa, ni mucho menos, pero sí que en estos encuentros se ha hablado de cómo se está dirigiendo el Barcelona y de la mala gestión realizada hasta el momento. Es más, también existieron movimientos políticos, pero estos algo más fríos.
Además de que no entra la pelota, a Laporta y sus chicos les están saliendo serios problemas. No se sabe cuando este grupo saldrá a la luz y explicará sus proyectos. Al presidente, si los juzgados lo permiten, le restan tres años más de mandato. Pero se intuyen complicados. El pueblo traga, pero empieza a estar empachado.
Jesús Ruiz-Beato (ex Nissan) defenderá al club
Ayer, en las páginas de este periódico, ustedes pudieron saber de una nueva demanda admitida a trámite por el juez Antonio Nuño de la Rosa, después de estudiar una denuncia de un socio (Vicenç Pla Cibrian) en la que denunciaba el incumplimiento del presidente culé y de su equipo de trabajo a la hora de presentar los avales bancarios pertinentes. En el Camp Nou la noticia sentó como una bomba, por lo que se han apresurado en contratar los servicios de un erudito en la materia para defender el caso. Se trata de Jesús Ruiz-Beato Bravo, ex vicepresidente de Nissan y persona en la que la familia política de Laporta confía plenamente. ¿Saben qué compañía presidían los Echevarría hace unos años?: Nissan.
