La máquina grana se dio un festín en Chamartín

La máquina grana se dio un festín en Chamartín

El Madrid había inaugurado el nuevo Chamartín en Liga ante el Athletic de Bilbao (28-12-1947), con una goleada (5-1) que hizo pensar en un escenario talismán. Pero tras las Navidades irrumpió el ascendido Nàstic para aguar la fiesta de los blancos.

Y eso que el tempranero tanto de Luis Molowny hizo pensar en un nuevo baño de goles. Pero el oportuno gol del punta canario ("yo jugaba de delantero, moviéndome por todo el área rondando siempre el gol", se autodefine) no fue impedimento para que el Nàstic diera la vuelta al marcador.

Los goles meritorios de Perdomo, Taltavull y Roig firmaron la primera derrota del Madrid en el estadio de Chamartín. Los 45.000 espectadores que llenaban las gradas se quedaron helados ante la exhibición de los grana, que dieron la tarde al guardameta Marín, impotente ante las contras del Nàstic. Los tarraconenses acabaron abrazados en el centro del campo.