David Albelda se mostró hoy tajante al dar sus razones por las que Luis Aragonés debe seguir como seleccionador nacional, asegurando que "si se le dio la confianza después del Mundial, ahora sería injusto pedir su cabeza" y "una barbaridad querer cambiarle".
"Los resultados son los que mandan, pero creo que si se le dio la confianza después del Mundial, ahora es injusto pedir su cabeza después de tres partidos en una clasificación en la que queda más de un año. En el Mundial no se cumplió el objetivo, pero si ahí se le dio la continuidad, querer cambiar ahora me parece una barbaridad, esa es mi razón, independientemente del partido de mañana", sentenció.
Para Albelda, el gran fallo han sido los resultados, sobre todo en el partido ante Irlanda. "No entraba en nuestro planes perder dos de tres partidos, aunque el resultado que de verdad fue un fallo fue el de Irlanda, porque Suecia es una selección potente contra la que puedes perder y además no lo merecimos, tuvimos ocasiones y no quiso entrar el balón", indicó.
De hecho, cree que la situación "no es límite, porque quedan nueve partidos". "Ahora llegan dos en casa en marzo y ganándolos se cambia la dinámica. Queda mucho margen y no veo ni a Suecia ganando todos los partidos que quedan", expresó.
Asegura que en el vestuario no falta unión, aunque cree que ése sí es el gran problema de base. "Falta de unidad general. En el fútbol cuando peor están las cosas, más unión hay dentro, es algo curioso.
No creo que ningún compañero haya mentido en la respuesta, para mentir me quedo en el hotel o en casa", expresó, sobre su apoyo al técnico.
"Pero me da la sensación que no hay una unidad general como la tienen en Argentina o Italia. Aquí siempre hay debates: que si el tema de Raúl, antes si Torres debía jugar, o que si era bueno el doble pivote del Valencia... siempre sale alguna historia", criticó.
Unión (de todos)
"Supongo que llegará algún día que todos nos pongamos la misma camiseta de España. Desde nosotros, vosotros y la afición, que al final se contagia. La selección necesita trabajar en un entorno tranquilo porque hasta al más fuerte le van mermando las fuerzas", lamentó
Así, cree que "la cuestión no es del entrenador o los jugadores" porque por la selección española "han pasado entrenadores, muchas selecciones, de jugones, de músculo y nunca se ha conseguido nada", sino que es "cuestión de encontrar una unidad": "Tengo claro que la va a haber en un Mundial, pero en todas las fases previas siempre ha habido debates".
Por otra parte, lamentó las declaraciones de su compañero Joaquín, sobre todo porque "no era el momento ideal", aunque cree que el del Puerto no ha "intentado hacer un ataque frontal". "Las considero inoportunas por el momento, porque creo que los problemas hay que decirlos mejor cara a cara, pero no le veo con una mente para lanzar ningún ataque a nadie", dijo.
Finalmente, confía en lograr mañana una victoria "para intentar tranquilizar un poco la situación" y confía en el apoyo del público, "aunque la gente es libre de expresarse y hasta ahora no ha habido ningún problema".
