Cuando nadie lo esperaba, Ronaldo subió ayer al autobús que, a las 20:30 horas, conducía al Madrid hasta su hotel de concentración, el Mirasierra Suites. El motivo: Van Nistelrooy se cayó de la convocatoria porque su mujer tendrá un hijo en las próximas horas. Así las cosas, Ronie podría tener opciones de jugar, adelantando en semana y media el plazo fijado por Capello para su regreso y que coincidía con el partido contra el Getafe del 15 de octubre. Juegue o no, el nuevo escenario acerca a Ronaldo al derby. La primera impresión (en sondeo casero) es que la noticia ha sido recibida como un soplo de optimismo entre el madridismo militante, incrementado al descubrir la inquietud que ha causado entre el vecindario rojiblanco. Es como si una vez asegurados los resultados (al menos en Liga), el Madrid necesitara ahora una sonrisa. La misma que se les borra a los atléticos por este parto repentino.

Ronaldo no juega con el Real Madrid desde el pasado 9 de abril, cuando la Real visitó el Bernabéu (1-1). Entonces, marcó un gol, pero se lesionó cuando bajaba a defender una contra donostiarra (cierto). Luego vino el Mundial y después, el 15 de julio, una operación en la rodilla izquierda que parecía poco menos que rutinaria y, sin embargo, fue mucho más.

Si Van Nistelrooy no se reintegrara hoy a la concentración, Capello debería buscar un nueve entre Raúl, Cassano, Reyes... o Ronaldo. La opción del brasileño es la última, pero no es descartable su concurso porque tal vez sea necesario contra el Atlético. Recuerdo que Raúl no marca en Liga desde el 26-O del año pasado.

Explicaciones.

Precisamente fue el capitán quien compareció ayer en conferencia de prensa. El capitán se presentó serio como quien visita una comisaría y lo negó todo. Primero, que haya perdido chispa, como insinuó Capello días atrás. Es más, aseguró que está mejor que hace diez años. Aunque esa es una afirmación que hemos escuchado a personas de toda edad y condición (incluso a nonagenarios), creo que sólo a los 18 se está mejor que diez años atrás, suposición que se cumple machaconamente con el sexo opuesto (a veces tan opuesto). La estrategia de Raúl es negar cualquier debilidad no vaya a ser que le tomen la palabra y le arresten. Si hoy marca se espera rabiosa celebración.

A la ausencia de Cicinho se unió ayer la de Salgado, que aún no está recuperado. Parece que será Sergio Ramos quien ocupe ese puesto, donde ya ha jugado en el Sevilla y en la Selección (nunca en el Madrid) y donde tenía previsto ubicarle Capello cuando llegó.

Decisión.

El propio entrenador descartó que fuera a repetir con Bravo como lateral diestro, como hizo contra el Betis. Una decisión sensata y que también debería corregir en el caso de Reyes que, aunque cumple en la derecha, sería mucho más profundo y generoso en el extremo zurdo.

El Dinamo aterrizó ayer en Madrid y pasó casi inadvertido, sin el glamour de otros visitantes. Por la tarde se entrenó en el Bernabéu, con cierto sigilo. Después de perder en Kiev contra el Steaua (1-4), necesitan puntuar en el Bernabéu si quieren seguir vivos. A falta de estrellas (Rebrov KO), tienen historia. Buena y mala. En 1995 López Nieto denunció que le habían ofrecido dos visones por favorecer al Dinamo y señaló a Igor Surkis, entonces general manager. Ahora ha ascendido a presidente. Cosas.