Con la expulsión de Fernando Torres el sábado pasado, el Atlético lleva dos rojas en otras tantas jornadas. De seguir así, el Atlético podría superar el número de tarjetas rojas que vieron sus jugadores la temporada pasada, que fueron 10. El año pasado, el detalle de las tarjetas fue un aspecto negativo del conjunto rojiblanco puesto que fue el tercero que más expulsiones sufrió después de Málaga, el primero, y Real Madrid, el segundo. Este año, se debía mejorar este aspecto, pero después de dos jornadas disputadas el objetivo se ha complicado. Durante la temporada pasada, a pesar de ser 10 expulsiones, fueron nueve los jugadores que vieron la roja: Luccin, dos veces, Antonio López, Falcón, Gabi, Ibagaza, Kezman, Pablo, Perea y Petrov. En esta campaña Seitaridis y Torres han abierto la lista y la plantilla, con Aguirre a la cabeza, deberá tomar algún tipo de medidas y conversaciones para que los jugadores ni realicen jugadas impulsivas ni caigan en provocaciones del contrario. Aguirre ya avisó ayer de que "se acabó el cuento. No puede haber más expulsiones por insultar o protestar; las de otro tipo, son propias del encuentro".