El italiano Fabio Cannavaro ha sido presentado en el estadio Santiago Bernabéu como nuevo jugador del Real Madrid, para las próximas tres temporadas, y lo hizo acompañado de Ramón Calderón y del presidente de honor del club Alfredo Di Stéfano.
En torno a las 12:30 de la mañana, elegante, portando su nueva camiseta con el número 5 a la espalda, el reciente campeón del Mundo en Alemania 2006, se convierte en el primer gran fichaje de la era post Florentino Pérez y en el sucesor, en número, de Zinedine Zidane y Manolo Sanchís. En su presentación, el capitán italiano declaró sentirse muy orgulloso por fichar por el Real Madrid. "Para mi es un gran honor esta aqui, en un club tan grande en Europa y en el mundo. Llego con gran entusiasmo porque para mi estar aqui a mis treinta y dos años y tras ganar un Mundial es algo increíble. Espero incorporarme rápido, no veo la hora de empezar a trabajar".
Ramón Calderón, por su parte, quiso agradecer al italiano su llegada al conjunto blanco y declaró durante la presentación que "las primeras declaraciones de Fabio nos llenan de orgullo y satisfacción. Sabemos su orgullo por incorporarse a nuestro club del que siempre se consideró un gran admirador".
Calderón señaló además que el italiano siempre fue objetivo prioritario para el club y que Pedja Mijatovic y Fabio Capello han trabajado muy duro para que la incorporación del defensa pudiese producirse. Según Calderón "Mijatovic tuvo todo nuestro apoyo desde el principio y han trabajado mucho para que este fichaje pudiera producirse".
Por último, el presidente "provisional" madridista, señaló la importancia que van a conceder al vestuario y la disciplina interna ya que "en el Real Madrid, y lo repito continuamente, porque es parte de la filosofía, nos preocupa la formacion deportiva y tambien que nuestros jugadores reciban enseñanzas que les permitan ser hombres, porque por encima de futbolistas deben ser personas. La tradición de nuestro vestuario hace que los veteranos instruyan a los jóvenes y por su personalidad y sus antecendentes la incorporación de Cannavaro es muy importante".
Ramón Calderón quiso despedirse de la presentación del italiano agradeciéndole, en el idioma del nuevo fichaje blanco, su incorporación y se despidió con un "Grace Fabio".
Del césped a la sala de prensa
Tras la presentación, y la firma del contrato que vincula al italiano al Real Madrid por las próximas tres temporadas y que se había producido minutos antes en los despachos del Santiago Bernabéu, Cannavaro se dirigió a los vestuarios para ponerse la que será su nueva equipación. Apenas unos minutos sobre el terreno del juego del Santiago Bernabéu, y con el cinco de los míticos Sanchís y Zidane a la espalda, Cannavaro fue recibido por mil seguidores madridistas que podrán volver a verlo en el primer partido de liga, de la temporada 2006/2007, en el propio estadio madridista ante el Villarreal.
Acto seguido, el italiano se dirigió a la sala de prensa donde respondió a las preguntas de los periodistas. Lo primero que hizo fue dejar claro que era un honor llevar la camiseta con el número cinco pero que no le supone ninguna presión extra. "Estoy acostumbrado a llevar la presión y se que era Zidane el que lo llebava anteriormente. Lo elegí principalmente porque lo llevé en el ultimo Mundial y porque sabia que quedaba libre. Es una responsablidad llevar ese número, pero no es un peso".
Como también es, aunque esta se trata de una responsabilidad gratificante según el italiano, fichar por el Real Madrid. Cannavaro señaló que tiene la misma ilusión que cuando tenía 18 años porque "amo jugar, me gusta mucho jugar al fútbol y buscar nuevas experiencias que hagan mantener esa ilusión. Esta lo es, por eso me hace la misma ilusión que cuando tenía 18 años porque siempre es muy especial seguir jugando año tras año". "Mis características como jugador son pelear y entrenar mucho, y darlo todo. Siempre estoy atento antes y después del partido. Soy un jugador que se emplea fuerte que da el máximo, que intenta siempre llegar y para mi llegar al club más importante del mundo es absolutamente gratificante".
Cannavaro también se refirió al cado Moggi, que se ha cobrado los descensos de la Juventus, la Fiorentina y la Lazio a la Serie B italiana, y la exclusión de la Champions al Milán, y señaló que "todo el mundo conoce la situacion en Italia. Yo en la Juve siempre he estado muy bien, su historia es muy importante y siempre jugué al máximo. Pero para mi se ha convertido en muy importante venir al Real Madrid, y cuando uno tiene 32 años y tiene la oportunidad de venir a jugar a Madrid no se desaprovecha". Además, el central italiano reconoció que si la Juventus no hubiera descendido a la Serie B "seguramente" no hubiera permitido su traspaso al fútbol español.
De recogepelotas a recoger la Copa
Catorce años lleva el defensa italiano en la élite del fútbol mundial, incluso 16 años antes, en el Mundial de Italia 90, Fabio Cannavaro habia sido uno de los recogepelotas, y la culminación de su carrera la vivió el pasado nueve de julio cuando, tras vencer a Francia en la tanda de penaltis, levantaba, como capitán, la Copa que acreditaba a Italia como campeona del Mundo, en Alemania 2006, y que la convertía en tetracampeona. Ha sido su catapulta, uno de los motivos que le han llevado a fichar por el Real Madrid. El resto son conocidos. Cannavaro es un defensa con gran fortaleza física, listo y rápido al cruce.
Tras fichar por el Nápoles, y jugar cuatro años en el conjunto en el que estuvo Maradona, pasó al Parma, donde militó siete temporadas. Sus últimos cuatroños en Italia, los pasó entre el Inter de Milán y la Juve, equipo salpicado por el Moggi-Gate que le ha llevado a descender a la Serie B y no disputar competición europea alguna la próxima temporada, algo que ha facilitado la salida de determinados jugadores importantes como es el caso de Fabio Cannavaro.
En su palmarés, además de la reciente consecución del Campeonato de fútbol Mundial disputado en Alemania, Cannavaro tiene en su haber una Copa de la UEFA y una Copa de Italia, conseguidas en 1999 con el Parma, dos Scudettos, conseguidos con la Juve en 2005 y 2006. Sólo le falta un título, la Champions League que espera conseguir la próxima temporada en el Real Madrid.
