Ronaldo es uno de esos jugadores que no falla en las situaciones límite y el partido de hoy ante Australia es una de ellas. La presión mediática dirigida a Carlos Alberto Parreira para que Ronie abandone el once titular en detrimento de Robinho es brutal, pero el 'nueve' de Brasil está seguro de que hoy callará todas esas críticas y devolverá al seleccionador brasileño toda esa confianza que ha depositado en él desde el inicio del Mundial.

Tal es la confianza que tiene Ronaldo en sí mismo para el encuentro de hoy que, según ha podido saber AS, el delantero, en una de las conversaciones que ha mantenido con su familia tras el encuentro ante Croacia afirmó esto: "estaros tranquilos que el domingo jugaré muy bien contra Australia". El domingo es hoy y la promesa de Ronaldo a su círculo más íntimo se tiene que empezar a cumplir a partir de las 18 horas, momento en el que comenzará el partido.

Parreira afirmó ayer de Ronie que "él es uno de esos jugadores que marcan las diferencias y mientras que haga eso, seguirá en el equipo titular". Ayer tras la conclusión del entrenamiento Ronaldo no quiso hablar con los medios de comunicación. "Hablaré con vosotros después del partido" dijo, y se marchó sin pasar siquiera por la zona mixta. Es la segunda vez que lo hace y la FIFA ya está muy 'mosqueada' con el brasileño.

Está picado.

La razón de este comportamiento es que Ronaldo anda muy enfadado con los medios de comunicación, tras los últimos días en los que el delantero brasileño ha tenido que soportar una auténtica persecución por parte de un amplio sector de la prensa tanto brasileña como internacional.

Hoy se puede desquitar, pero como no marque y no juegue bien, va a nacer un clamor popular para limpiarle del once, aunque Parreira siga confiando en él, mínimo hasta después del partido ante Japón. Los de hoy, son noventa minutos vitales para el Fenómeno...