Si fuese un héroe de cómic, sus fans le apodarían Raulman. El capitán del Real Madrid se convirtió en la noche del miércoles en el hombre-guinness de la Champions. Su gol al Olympiacos, firmado con un cabezazo que batió a Nikopolidis, le ha colocado en la 'cota 50', jamás alcanzada en Copa de Europa por ningún otro futbolista. "Llegar a esta cifra me hace muy feliz, pero es el fruto del trabajo y el sacrificio de todos mis compañeros", declaró a AS el jugador, que ha dejado atrás a Alfredo Di Stéfano (49 goles), una leyenda viva para los madridistas.

Nada más ducharse y firmar el acta, Raúl se vistió como lo que es, un chaval de 28 años. Vaqueros y camiseta, con el número 78 impreso. Una cifra que está por debajo de sus registros en Champions (99 partidos, 3 títulos, 50 goles...). Poco acostumbrado a dejarse llevar por las emociones, el capitán entendió la excepcionalidad del eurorécord y pidió a todos sus compañeros que le firmasen el balón del partido con los atenienses.

Hay más motivos de gozo para Raúl. El próximo 18 de octubre se cumplirán diez años de su primer gol en la Copa de Europa. Ante los húngaros del Ferencvaros marcó un hat-trick (6-1). Después llegaron la Séptima, la Octava (marcó un golazo, el 3-0 al Valencia en París) y la Novena (firmó el 1-0 al Leverkusen con un tiro raso). Un promedio de lujo: más de medio gol por partido (0,505). Y no olviden su doblete en Old Trafford, en la noche del jugadón de su amigo Redondo...