Campo, Miñambres, Gascoigne o Deisler sufrieron trastornos

Primera | Sevilla

Campo, Miñambres, Gascoigne o Deisler sufrieron trastornos

Campo, Miñambres, Gascoigne o Deisler sufrieron trastornos

El Calcio se confiesa estresado

El caso Navas no es ni mucho menos el primero que se conoce acerca de las crisis de ansiedad que afectan a futbolistas. Sin ir más lejos, el pasado 7 de julio, un estudio de la consultora Eta Meta Research sobre 124 jugadores de la Series A, B y C del Calcio desveló que casi la tercera parte afirmaron sentirse estresados: la tensión psicológica, el miedo a desilusionar las expectativas, las presiones y críticas de los aficionados y los medios de comunicación y la posibilidad de resultar lesionados fueron las causas citadas mayoritariamente por los profesionales del fútbol como las causantes de este trastorno.

En España, y además de Jesús Navas, otros cuadros de ansiedad han visto la luz recientemente. En octubre de 2001, el por entonces madridista Iván Campo quedó apartado del equipo por este motivo, lo que le impidió volver a jugar hasta enero del año siguiente. En junio de 2003, Óscar Miñambres abandonó una concentración de la Selección Sub-21 por culpa de la ansiedad. Y en diciembre de ese mismo 2003, el españolista Toni Soldevilla estuvo siete meses apartado del fútbol por culpa de una depresión.

Al psiquiátrico. Pero tal vez el caso más sonado sea el del internacional alemán Sebastian Deisler. El centrocampista del Bayern ingresó durante dos semanas en un hospital psiquiátrico y estuvo tres más de baja en 2003 por una depresión nerviosa de la que recayó en octubre de 2004. El jugador ha sido tratado por varios especialistas y parece haber recuperado la confianza.

También en la Premier hubo casos muy sonados. Stan Collymore señaló recientemente que "durante mis etapas en Liverpool, Leicester y Aston Villa caí en numerosas ocasiones en crisis de ansiedad. No soportaba verme todos los días en los medios, salir de casa y que todo el mundo me conociera... La popularidad me agobiaba".

Paul Gascoigne y Paul Merson, durante su etapa en el Middlesbrough, también sufrieron trastornos depresivos severos, según han reconocido ellos mismos. Incluso, Gazza apuntó en su autobiografía, My Life, que estuvo a punto de suicidarse: "Me fui a la estación de Stafford, miré a la vía, me puse entre los raíles esperando al tren... y no llegó a su hora. Se había averiado poco antes de llegar a su destino. Está claro que ése no era el momento en el que debía morir".