"Para la gente soy Galletti, el que metió aquel gol al Madrid"

Galletti

"Para la gente soy Galletti, el que metió aquel gol al Madrid"

"Para la gente soy Galletti, el que metió aquel gol al Madrid"

alfonso reyes

El Hueso celebró con AS el aniversario del triunfo del Zaragoza en Montjuïc. El principio del fin de los Galácticos.

Aquel gol parecía sólo un gol que le daba un título al Zaragoza. Un año después, ese instante es el inicio de la demolición del Madrid galáctico.

Sí, ahora se habla más de ese aspecto que del título. Yo sabía que sería así, que con el tiempo iba a ganar importancia. Y es cierto, ahora para la gente soy Galletti, el que le metió aquel al Madrid. Ha quedado muy grabado por el rival y la forma en que ganamos el título.

Ahora es muy fácil hablar mal de los Galácticos y de los errores de Florentino. Pero hasta hace un año se discutía si ese no sería el mejor equipo de la historia del Madrid.

Es cierto. Cuando comenzó la temporada iban a ganar todos los títulos, le decían el mejor equipo del mundo... Una vez que ganas los partidos, te pueden decir lo que quieran, pero hay que ganar. Y nosotros ganamos en el campo. Sabíamos que a un partido podíamos hacerlo si no cometíamos errores. Fuimos superiores físicamente, sobre todo, y también por fútbol.

El Madrid tuvo pasajes muy buenos en aquel partido.

Cuando Beckham metió el gol pensamos que nos iban a arrollar, pero nuestro equipo se comportó con mucha madurez, siendo un equipo joven. Seguimos jugando de la misma manera, empatamos, hicimos el 2-1... El gol de Roberto Carlos, ni bien comenzaba el segundo tiempo, fue otro momento crítico. Y respondimos de nuevo: les presionamos, les quitamos el balón, si había que dar una patada, la dimos... ¡Nosotros salimos a jugarnos la vida!

Uno tuvo esta impresión: a los cinco minutos ya sabíamos que el equipo que estaba en el campo era el Zaragoza de las grandes ocasiones. Aplomado, sereno, bien plantado... ¿Estaban ya así en el vestuario?

Estábamos muy confiados. En el Bernabéu ya hicimos muy buen partido tres días antes. Ellos decían que la final sería distinta, pero nosotros sabíamos que no, que era la oportunidad de nuestras vidas. Todos soñábamos una final con el Madrid y se vio desde el principio que estábamos bien. Le perdimos el respeto al Madrid, a sus jugadores, nos olvidamos contra quién estábamos jugando.

¿Sospecharon alguna vez que esa derrota tendría el efecto tan demoledor que ha tenido?

Es que para nosotros nunca fue así, no tuvimos responsabilidad ninguna en lo que ha ocurrido. Todos dicen que la debacle del Madrid parte de aquel día, pero yo creo que ya antes venía decayendo físicamente. Nosotros fuimos superiores en ese aspecto. Yo les noté cansados. Luego perdieron todos los títulos, pero aquel día no perdieron ellos, les ganamos nosotros.

Quedó el gol de Galletti. ¡Pero Galletti salió de suplente!

Tengo el recuerdo de aquel día partido en dos. Antes de jugar, el día fue uno de los más tristes de mi carrera. Quedarme fuera de una final, contra el Madrid, me dolió muchísimo, pero sabía que podía cambiarlo si tenía la oportunidad de jugar y haciendo algo importante. Después uno se olvida. Entré a la cancha y se me pasó todo. Y ganamos un título que yo siempre quise ganar.

¿Y uno llega a perdonar a un entrenador algo así?

No se trata de perdonar, es que me hubiera gustado jugarla, sin más. Éramos veintitantos y todos queríamos ayudar. Hubo gente que se quedó en la grada. Egoístamente cada uno quiere jugar, pero lo que importa es la suerte del equipo.

Usted tuvo recompensa.

Terminé el partido como lo había soñado, metiendo el gol del título. ¿Qué más vas a pedir?

¿Fue su primer momento de felicidad en el Zaragoza?

Fue el día más lindo hasta ese momento, pero he vivido cosas muy bonitas en Zaragoza. Es cierto que tras mi primer año nos fuimos a Segunda, pero yo siempre he sentido que crecía aquí, hicimos el ascenso y con los fichajes se ha hecho un equipo joven, con mucho futuro.

Usted entró de un pelotazo en la Santa Trinidad de los goleadores históricos: Rubén Sosa frente al Barcelona en 1986 y Nayim en la Recopa en París...

Pero yo no le doy mucha importancia. La final la ganamos todos. Para mí el gol lo hizo todo el zaragocismo: la pelota se iba fuera y entre todos la metieron.

Hay una versión madridista que dice que, con Casillas, ese gol no hubiera entrado.

Y bueno, ¿qué quieres? (se ríe). La verdad es que aquella pelota salía mucho, y el tipo se estiró. A mí me parecía que iba afuera, pero luego se dirigió a la portería y entró.

¿Cómo recuerda la acción?

La tenía Villa sobre el centro. Yo me vine para la derecha y vi que la pelota me llegaba. Desde que la vi venir pensé que quería pegarle, así que di un paso medio extraño hacia atrás, para acomodarme, y le pegué casi parado. Salió muy fuerte, con una comba muy acusada. La miré y parecía que se iba afuera, pero luego se fue metiendo. Era una sensación impresionante, y cuando entró recuerdo el ruido de la gente... Una locura.

Hubo como un momento extraño de pausa, de suspensión, antes de que usted le pegara.

Es cierto, también a mí me pareció. como si se hubiera paralizado la imagen. Como cuando bajas el sonido y la pelota va sola. Cuando le pegué a la pelota no había nada: un silencio y luego, la explosión.

Tras el gol usted corrió tranquilamente hacia el fondo zaragocista. Dio la impresión de tener una conciencia plena de lo que había hecho y querer entregarle a la gente su alegría.

Para mí la gente fue siempre muy importante, desde que llegué al Zaragoza. Fui el segundo jugador más caro de la historia del club, descendimos, yo jugaba poco... Y me parece que la hinchada entendió que yo necesitaba tiempo para adaptarme.

De todos los titulares del día siguiente, hubo uno muy celebrado: "Galleticos".

Lo puso 'Olé'. Mi madre tiene el recorte, lo guardó emocionada. Hubo otro que me gustó mucho, no sé dónde lo pusieron: "La Galaxia chocó con un Hueso", algo así, fue muy divertido.

¿Y la llamada de Maradona?

Un amigo común me dijo que él estaba en Cuba y que llamaba cada diez minutos a ver cómo iba el Zaragoza. Imagínate, que Maradona se interese por nosotros... (risas).

¿Estaba su padre en el partido aquella noche?

No, estaban mi esposa, mi hija y mi hermano. Y mi hermano justo lo estaba grabando en una cámara en el mismo campo. Así que tengo el gol filmado por mi hermano, lo vimos en casa y por ahí en el momento del gol se le oye gritar a mi hermano: ¡Goooooool, la madreeeeee!

¿Y a sus niñas se lo enseñó en el vídeo?

No, no. Pero para mi hija siempre que gana el Zaragoza yo hice un gol. Le preguntan: "¿Cómo salió el Zaragoza?" Y ella dice: "Ganó". "¿Y gol de quién?" "De mi papá", contesta siempre... ¡Algún día se va a dar cuenta de que no marco ni uno, pero por ahora es feliz!