El centrocampista del Real Madrid Thomas Grevesen se quejó tras la eliminación anoche de su equipo en Copa frente al Valladolid del estado del césped del Santiago Bernabéu, que calificó de "lamentable", aunque sin culparlo únicamente de la derrota.

"El campo está en un estado lamentable, es difícil jugar un fútbol brillante, porque el balón salta y baila, y uno resbala continuamente", afirmó el último fichaje "blanco" en declaraciones aparecidas este jueves en el diario "Ekstra Bladet".

El internacional danés dijo sentirse apenado por la derrota, pero al mismo tiempo "contento" por haber salido de titular y haber jugado los noventa minutos, y reconoció que se sintió "mejor" en la segunda parte, cuando Wanderlei Luxemburgo lo situó en el centro.

Gravesen, quien entiende que el técnico quería verlo en varias posiciones distintas, justificó la pitada del público por la eliminación, independientemente de quien fuera el rival, y señaló que lo mismo ocurría en Alemania e Inglaterra.

No obstante, confesó no estar del todo satisfecho con el gran apoyo que le está mostrando la afición, ya que él cree que puede rendir mucho más.

"Aún no soy yo mismo"

"Ha habido muchas experiencias y jugadores nuevos. Aún no soy del todo yo mismo, pero iré mejorando, aunque me irrita no poder jugar mejor por culpa de este césped", afirmó el jugador.