El Atlético invierte esta noche el orden habitual de los acontecimientos y la Copa llega después de la resaca. Todavía medio groggy por el extraño derby del domingo, el equipo de Ferrando regresa esta noche en Lorca a la competición que es su oscuro objeto del deseo. Nadie lo dice, pero aspira a un título que, una vez que la Champions empieza a alejarse, sería la puerta a Europa más brillante.
Sin embargo, la entrada en liza de la eliminatoria a doble partido y la benevolencia del sorteo, que le ha emparejado a un Segunda B con problemas, permitirá a Ferrando rotar. El técnico ha dejado fuera de la convocatoria a Torres, Perea, Luccin, Sergi, Velasco, Sosa, Aguilera y Nano. En el caso del Niño, el descanso será tanto físico, aún le molesta su fisura costal, como mental, después del bombardeo al que fue sometido tras el derby.
Rotaciones. Sin Torres, la mayor parte del protagonismo recaerá en Gronkjaer y en los cuatro canteranos convocados: Cuéllar, Braulio, Molinero y Raúl Medina. Estos dos últimos serán titulares. El lateral se ganó en el derby la confianza de Ferrando, mientras que Medina, un pivote defensivo, será bastante habitual tras la marcha de Simeone. Por su parte, el danés será, junto al titubeante Ibagaza, el principal argumento ofensivo rojiblanco, si se ha recuperado de la lección intensiva de qué es el Atlético en 90 minutos que recibió el domingo. Hoy jugará por la derecha dejando la izquierda para Musampa, que sí, aún existe. Si Novo, que ha entrado en la lista, juega un rato puede ser la noche de los muertos vivientes.
El Lorca, que nunca había llegado tan lejos en la Copa y eliminó al Málaga en dieciseisavos, acaba de cambiar de entrenador. Emery adelantó su retirada para sentarse en el banquillo y hoy se estrena en casa con Huegun, un trotamundos que ha pasado por ocho equipos y que en 2003 vivió el secuestro de su hermano por el ELN colombiano, como estrella, y con un portero, Bernal, al que le ha dicho que busque equipo porque no confía en él. No parece la mejor situación para dar la campanada, pero el Atlético es especialista en hacerse el hara-kiri, así que no desconecten.
