La FIFA dictó sentencia. El máximo organismo del fútbol internacional multó a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) con 100.000 francos suizos (65.019 euros) por los gritos racistas en los amistosos España-Inglaterra de categoría Sub-21 y absoluta, disputados el 16 y el 17 de noviembre en Alcalá de Henares y Madrid. La FIFA fue dura, ya lo había anunciado, pero el castigo ha golpeado únicamente a las arcas federativas. Luis Aragonés, que también se sometía a juicio por sus comentarios sobre Henry (a quien tildó de "negro de mierda" al por motivar a Reyes durante un entrenamiento), quedó libre de culpa. Pese a ello, la Federación Inglesa (FA) señaló sentirse "satisfecha" con el veredicto.

La Comisión Disciplinaria, presidida por el suizo Marcel Mathier, "encontró culpable a la RFEF de haber violado el artículo 73, párrafo 1, del Código Disciplinario de la FIFA, y el artículo 72, párrafo 2, que la hace responsable del comportamiento de sus seguidores". Una vez resuelto el pasado, la FIFA dejó claro cuál será el castigo en caso de reincidencia: "La selección española podría tener que jugar uno o varios partidos a puerta cerrada o incluso ser excluida de una o varias competiciones organizadas por la FIFA".

La RFEF no recurrirá.

Con esta multa -que deberá saldarse en el plazo de un mes-, la FIFA zanja el debate internacional motivado por lo que ocurrió en el Santiago Bernabéu, donde Shaun Wright-Phillips, Ashley Cole y Jermaine Jenas fueron objeto de cánticos racistas. La RFEF acató la multa: "La decisión de la FIFA hay que respetarla y no vamos a recurrir la sanción". Ésa es la mejor manera de dar carpetazo a un asunto que excedió el fútbol y salpicó incluso a Downing Street y el Palacio de la Moncloa.

El expediente a Luis, disciplinario

El Comité de Competición nombró al abogado Carlos Muñoz instructor del expediente a Luis. Esta decisión implica que la actuación contra el seleccionador pase de tener carácter informativo, como se acordó la pasada semana, a disciplinario. El hecho de que la FIFA no haya sancionado a Luis permite que pueda continuar el proceso, ya que, en caso contrario, se habría contravenido la máxima denominada non bis in idem (no dos veces lo mismo), que impide mantener dos juicios paralelos por un mismo motivo. Al tratarse de un procedimiento extraordinario su resolución se demorará unos dos meses. Cuando el instructor termine el expediente realizará una propuesta de sanción no vinculante al Comité, siempre y cuando no considere su sobreseimiento. El reglamento de la Federación Española de Fútbol no tipifica de forma expresa los actos o declaraciones susceptibles de ser considerados racistas, aunque se puede utilizar el artículo 101. j correspondiente a las infracciones muy graves, que alude "en general, a las conductas contrarias al buen orden deportivo cuando obtengan esta calificación". Las sanciones oscilan entre la inhabilitación temporal y multas de hasta 30.000 euros. La FEF ha ordenado la intervención de su organismo disciplinario por mandato de Antiviolencia. -Juan M. Gascón